En la primera mitad del siglo XX, la mayoría de las organizaciones de artistas plásticos de Uruguay contaba con un espectro de intereses en común muy amplio. Rondaban, sin embargo, una serie de contradicciones; entre ellas, la competencia entre salones y concursos, la adhesión a determinadas corrientes estéticas, el posicionamiento ante diversas ideologías políticas, etc. Todo ello fue motivo de unión y también de disidencia entre agrupaciones. A finales de la década de los treinta, en el Uruguay, los salones nacionales y los concursos premiados, estaban organizados y también jurados, por personalidades de la política allegados al dictador Gabriel Terra. La línea artística conservadora (promovida por los salones nacionales) generó reacciones contrarias de los artistas formados en el movimiento modernista. Surgieron en este periodo agrupaciones como CTIU (Confederación de Trabajadores Intelectuales de Uruguay) con un comité de artistas plásticos; la AIAPE (Agrupación de Intelectuales, Artistas, Periodistas y Escritores); la FEPU (Federación de Estudiantes Plásticos de Uruguay), todas ellas agrupaciones en mayor o menor medida contestatarias. En esta situación se crea la Comisión Municipal de Cultura en la órbita del gobierno de la ciudad de Montevideo con el objeto de estimular las actividades de ese campo desde una perspectiva distinta (si no opuesta abiertamente) a la del gobierno nacional, que tenía bajo su control el Salón Nacional de Bellas Artes. Por su parte, la AIAPE (fundada en 1936 con un perfil político antifascista y pacifista) busca apoyar a la Comisión Municipal para abrir un espacio de participación de artistas inexistente como proyecto del gobierno nacional. En tal sentido, la exposición-venta en beneficio del pueblo chileno tiene dos objetivos. Por un lado, el de dar una señal de apoyo al Frente Popular de Chile (bajo la presidencia de Pedro Aguirre Cerda); y por el otro, hay el afán de ampliar la base social de AIAPE buscando nexos de gestión con organismos estatales, como es el caso de la Comisión de Cultura. Ésta, por su parte, estaba llevando a la práctica su primera exposición de artes plásticas. Inobjetablemente, el año de 1939 es fecha de inflexión en la historia de AIAPE. [Como lectura complementaria, véase en el archivo digital ICAA los textos publicados en AIAPE: de Joaquín Torres García, “La exposición. [Amigos de España]” (doc. no. 1191197), “El Arte de Arzádum” (doc. no. 1223148), y “El arte de David Alfaro Siqueiros” (doc. no. 1238628); por Cipriano S. Vitureira, “1er Salón Municipal de Artes Plásticas/Su contenido artístico” (doc. no. 1184568), y “La pintura de Miguel Ángel Pareja” (doc. no. 1223795). Además, consúltese: de Justino Zavala Muniz, “El artista y el Estado” (doc. no. 1216580); “Arte simple”, por Atahualpa del Cioppo (doc. no. 1223119); de Carmelo de Arzadum, “Las artes plásticas de 1936 a 1939” (doc. no. 1224706), y “Urruchúa (doc. no. 1224405); por Roberto Ibáñez (redactor responsable), “Demetrio Urruchúa con Nosotros” (doc. no. 1223661), “Las exposiciones. Las remuneraciones artísticas” (doc. no. 1225449)”, “Los jurados del próximo Salón Nacional de Bellas Artes” (doc. no. 1225548), “Michelena- Escultor” (doc. no. 1223386), y “Plataforma de aspiraciones de los plásticos de la A.I.A.P.E.” (doc. no. 1225398); de Homero Clerici, “Los estudiantes plásticos y la AIAPE [Agrupación de Intelectuales, Artistas, Periodistas, y Escritores]” (doc. no. 1225286); por Felipe Novoa “El grabador Carlos González” (doc. no. 1223870); de Gisleno Aguirre, “La nueva Asociación de Artistas Plásticos” (doc. no. 1225166); de Orestes Baroffio, “Objeto y Significación de Un Salón de Arte” (doc. no. 1210990); y de C.L., “Teseo: los problemas del arte” (doc. no. 1223765). Hay también un gran número de textos sin firma publicados en AIAPE: “Temas de discusión sobre la cultura Americana” (doc. no. 1225812) “La actividad plástica del año” (doc. no. 1223617); “Alianza de intelectuales, artistas y escritores bolivianos” (doc. no. 1225763); “El arte mejicano” (doc. no. 1225519); “Bases A.I.A.P.E (Agrupación de Intelectuales, Artistas, Periodistas y Escritores)” (doc. no. 1226697); “Cae decorado de Berni bajo la piqueta del G.O.U” (doc. no. 1225213); “Cultura de liberación” (doc. no. 1226424); “Cultura en el orden internacional” (doc. no. 1223996); “La ética social del artista”, sin forma (doc. no. 1223962); “Fuera del Salón Oficial” (doc. no. 1221528); “El jurado designado por la Comisión Nacional de Bellas Artes no contempla las aspiraciones de los plásticos” (doc. no. 1225373); “Los jurados de los salarios artísticos de 1935 atentó contra la cultura” (doc. no. 1225596); “La libertad en Portinari” (doc. no. 1225346); “El mensaje de Antonio Berni” (doc. no. 1223596); “Notas editoriales e informativas” (doc. no. 1226398); “Noticia de David Alfaro Siqueiros” (doc. no. 1223640); “Una opinión sobre el 6° Salón Nacional” (doc. no. 1225722); “Optimismo sobre España” (doc. no. 1225185); “Página de crítica y polémica. Las exposiciones” (doc. no. 1221503); “La pintura en el V Salón de Otoño” (doc. no. 1225672); “Reconocimiento a Élie Faure” (doc. no. 1223458); “VIII Salón Nacional de Bellas Artes” (doc. no. 1211227); “Sobre la querella del realismo” (doc. no. 1225636)].