En octubre de 1945, se inauguró en Montevideo, la exposición 20 Artistas Brasileños, con obras de exponentes de la pintura contemporánea brasileña: Tarsila Do Amaral (1886–1973), Alberto da Veiga Guignard (1896–1962), José [Giuseppe Giannini] Pancetti (1902–58), Sérgio Camargo (1914–94), [Emiliano Augusto Cavalcanti de Paula Albuquerque e Melo] Di Cavalcanti (1897–976) y Candido Portinari (Brasil, 1903–62), entre muchos otros. Dos años después, Portinari llegó a Montevideo encontrándose con un panorama cultural complejo donde diversas tendencias estéticas se entrecruzaban ya que las relaciones entre arte y política habían generado intensos debates y tensiones en el ámbito de las artes plásticas. Tanto el realismo social como el discurso de la modernidad arroparon al pintor brasileño en su llegada a la capital uruguaya: los camaradas del PCU (Partido Comunista Uruguayo) y de AIAPE, al igual que muchos artistas del realismo social, lo apoyaron incondicionalmente. En cambio, adversarios políticos y artistas plásticos que diferían con su postura, descalificaron su pintura y su labor artística. Portinari defendía la posibilidad de instalar un “arte realista politizado” — a ser determinado por modelos de cuño nacionalista— que definiera un estilo propio de la modernidad. Debía ceñirse por otra parte, a las circunstancias ideológicas, económicas y políticas que lo contextualizaban. A juicio del pintor brasileño, el arte plasma esencialidades de la condición humana. Podemos remontarnos al pensamiento de Giordano Bruno (1548–1600) o bien de G. W. Hegel, considerando el concepto de “libertad en el arte” como el punto de convergencia de ambos en relación a una determinada línea de pensamiento: el arte prometería al espectador un realismo vital de la verdad. Por tanto, los conceptos de “libertad”, “belleza” y “sentimiento” son consecuencia de esa “realidad” que es intrínseca del arte. En ese momento de posguerra, la Comisión Nacional de Bellas Artes, no juzgaba adecuado abanderarse con un realismo-politizado afín al “estilo y pensamiento modernos” de Portinari.
[Como lectura complementaria, véase en el archivo digital ICAA, los textos del crítico brasileño Mário Pedrosa sobre Cândido Portinari: (sin título) [A pintura mural de autoria de Cândido Portinari] (doc. no. 1110857); “A Missa de Portinari” (doc. no. 1075493); y “Portinari”, de Afonso Arinos de Melo Franco (doc. no. 1110887)].