La carrera del pintor venezolano Mateo Manaure (n. 1926) encuentra una revisión significativa en este texto de Juan Calzadilla (n. 1931), un crítico que privilegia a ese artista. En 1967, momento de la publicación, Manaure dio a conocer la serie Suelos de mi tierra donde retornaba al lenguaje de la pintura pura sintetizando así sus búsquedas anteriores: un lenguaje gestual-informalista, depurado de toda figuración y evocador de atmósferas interiores. En este momento de síntesis, Calzadilla evalúa la trayectoria precedente, colocando en contexto no sólo a Manaure, sino a los diferentes eventos, personajes e instituciones, y su significación dentro del arte en Venezuela. Del mismo modo en que rescata el elemento poético —como constante en su trabajo—, profundiza en la índole de los procesos creativos vinculados con cada etapa; esto es, crisis, autocrítica, desorientación e, incluso, ensayos que no llegaron a materializarse en exposición. A juicio de Calzadilla, el acontecer histórico encuentra su contraparte en la dinámica interna como motor de su creación. Otros factores brindan una comprensión integral de su obra, ya sea su desempeño dentro del diseño gráfico o bien sus diferentes iniciativas en la creación de espacios expositivos como lo realizado en la Galería Cuatro Muros. Destacan las reflexiones de Calzadilla en materia de diferentes tendencias abordadas por el artista: el autor rescata especialmente su vínculo con el surrealismo y revela tensiones generadas entre una inclinación poética y lírica del pintor y el carácter racional e impersonal de la geometría-abstracta, lo cual resulta en búsquedas tanto surrealistas como informalistas. El texto es representativo de una mirada retrospectiva y crítica a la abstracción-geométrica (casi dos décadas después), revelando tanto aportes como desaciertos del movimiento, sobre todo en materia de integración arquitectónica.
[Con respecto a su obra, consúltese los siguientes textos en el archivo digital ICAA: de Víctor Guédez “La creación estético-visual en Mateo Manaure” (doc. no. 1155531); de Roberto Guevara “Manaure y la inmensa noche” (doc. no. 1156411), “Manaure: columnas en tierras movedizas” (doc. no. 1155515) y “Manaure y las Cuvisiones” (doc. no. 1156459); de Perán Erminy “Las imágenes poéticas de Manaure” (doc. no. 1156523); de Alfredo Boulton “Mateo Manaure en el Museo de Bellas Artes” (doc. no. 1157497); de Gastón Diehl “Mateo Manaure” (doc. no. 1156491); los artículos, tanto de Teresa Alvarenga “Mi obra de hoy: Mateo Manaure llega a los 50 años” (doc. no. 1156427) como de Pedro Lhaya “Mateo Manaure o la autenticidad pictórica americana” (doc. no. 1156443); el artículo de Alejo Carpentier “Letra y Solfa: arte abstracto” (doc. no. 1097108); otros textos de Calzadilla titulados “Interacción de mitos “ (doc. no. 1156811) y “Sobremontajes de Manaure” (doc. no. 1156507); y lo escrito por el propio Manaure, “La decisión de un artista” (doc. no. 1156475) y “La escuela de artes plásticas de frente y de perfil” (doc. no. 813569)].