El crítico y dibujante Juan Calzadilla (n. 1931) publica este texto en el marco de la exposición Pinturas sobremontaje (Caracas: Sala Mendoza, 1965) de Mateo Manaure (n. 1926). Las así denominadas “pinturas sobremontaje” eran el resultado de la convergencia de la pintura y el collage con la fotografía, amén de sus diferentes posibilidades de montaje, ampliación y reimpresión. Manifestaban de algún modo, a juicio de Calzadilla, el vínculo que Manaure estableció con el movimiento surrealista durante su estancia en París (1948?52). La exploración en formas fantásticas o ambiguas en su pintura de aquel período encontró expresión y actualización una década después a través de los medios propios de los surrealistas (el fotomontaje y los procedimientos de diagramación del diseño gráfico), así como en la experimentación con objetos y ensamblajes emprendida desde 1960. A su regreso a Venezuela, a principios de los cincuenta, Manaure incursionó en el diseño gráfico, convirtiéndose en gran promotor y exponente de esta disciplina. Las “pinturas sobremontaje” constituyen, de este modo, una síntesis tanto de sus inquietudes temáticas como de los medios concretos con que estuvo involucrado. En este sentido, Calzadilla considera esa propuesta de Manaure en torno al “sobremontaje” no como ruptura sino como continuidad de búsquedas. Ya estaba de manifiesto en la obra del pintor desde su etapa surrealista parisina e, incluso, desde la exhibición de los “paisajes imaginarios” de Caracas que representan la expresión de un universo interior e inquietante.
[Con respecto a su obra, consúltese los siguientes textos en el archivo digital ICAA: de Víctor Guédez “La creación estético-visual en Mateo Manaure” (doc. no. 1155531); de Roberto Guevara “Manaure y la inmensa noche” (doc. no. 1156411), “Manaure: columnas en tierras movedizas” (doc. no. 1155515) y “Manaure y las Cuvisiones” (doc. no. 1156459); de Perán Erminy “Las imágenes poéticas de Manaure” (doc. no. 1156523); de Alfredo Boulton “Mateo Manaure en el Museo de Bellas Artes” (doc. no. 1157497); de Gastón Diehl “Mateo Manaure” (doc. no. 1156491); los artículos, tanto de Teresa Alvarenga “Mi obra de hoy: Mateo Manaure llega a los 50 años” (doc. no. 1156427) como de Pedro Lhaya “Mateo Manaure o la autenticidad pictórica americana” (doc. no. 1156443); el artículo de Alejo Carpentier “Letra y Solfa: arte abstracto” (doc. no. 1097108); así como los textos del propio Manaure “La decisión de un artista” (doc. no. 1156475) y el escrito sobre “La escuela de artes plásticas de frente y de perfil” (doc. no. 813569)].