El periodista Pedro Lhaya realizó esta entrevista a Mateo Manaure (n. 1926) en el marco de su exposición individual Suelos de mi tierra, organizada por la Sala Mendoza (Caracas, 1967). Tanto su apreciación inicial como las declaraciones del pintor venezolano nos introducen en la trayectoria de Manaure sobre el concepto de la identidad latinoamericana. Esta inquietud por los valores del continente y su expresión a través de las artes acaparó la atención en las discusiones sobre el ámbito cultural en la década de setenta. Pasó por el doble filo de cuestionar severamente la influencia de los movimientos artísticos de corte internacional. Así, esta entrevista constituye una antecedente de debates posteriores en el campo de la plástica nacional; revela, además, la preocupación reflejada en su particular desarrollo formal y expresivo. A finales de la década del cincuenta, Manaure había transitado de la abstracción geométrica a la abstracción lírica; hacia 1962 ya había retornado a la figuración. Tras una etapa de experimentación con medios de cuño surrealista (objetos, fotomontajes y collages), Manaure inicia la serie Suelos de mi tierra, en la que la depuración de formas y el manejo predominante de atmósferas cromáticas aluden a universos interiores. En este punto, la dimensión vivencial de la propuesta y su vínculo con referentes tanto locales como naturales, contribuyeron a articular dicha serie con aquel discurso en defensa del rescate del imaginario continental y en abierta confrontación con al auge de tendencias calificadas de “formalistas”. Manaure asume una posición aún más radical hacia los años ochenta: retorno definitivo al arte figurativo y cuestionamiento ostensivo de la validez de la abstracción tomándose en cuenta problemáticas del país en ese momento.
[Respecto a obra de Manaure, consúltese en el archivo digital ICAA: de Víctor Guédez “La creación estético-visual en Mateo Manaure” (doc. no. 1155531); los textos de Roberto Guevara “Manaure y la inmensa noche” (doc. no. 1156411), “Manaure: Columnas en tierras movedizas” (doc. no. 1155301), y “Manaure y las Cuvisiones” (doc. no. 1156459); el ensayo de Perán Erminy “Las imágenes poéticas de Manaure” (doc. no. 1156523); lo escrito por Alfredo Boulton en “Mateo Manaure en el Museo de Bellas Artes” (doc. no. 1157497); el texto de Gastón Diehl “Mateo Manaure” (doc. no. 1156491); el artículo de Teresa Alvarenga “Mi obra de hoy: Mateo Manaure llega a los 50 años” (doc. no. 1156427); y finalmente, del propio Manaure un recuento de naturaleza crítica en torno a “La Escuela de artes plásticas de frente y de perfil” (doc. no. 813569)].