Nota editorial que da cuenta de los logros obtenidos por la política de actividades culturales masivas —como los festivales Contacta 72 e Inkari— desarrollada por el autodenominado Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas en el Perú (1968–75). Se precisa que, aunque los lineamientos generales de dicha política son formulados por el INC (Instituto Nacional de Cultura), la vastedad de este campo lo convierte en tema de preocupación general y debate permanente. Se aclara que el proceso revolucionario no intervendrá en la expresión artística, pues “existe una amplia libertad de creación e interpretación, una proliferación de escuelas y tendencias”. Sin embargo, el apoyo a la libertad creativa por parte del Estado pretendería romper con la “dependencia cultural y con las subculturas populacheras con que nos ha enfermado el capitalismo”. Concluye que, como resultado de estas acciones, “la Revolución Peruana está abriendo las puertas a un vigoroso renacimiento de la cultura nacional, nutrida, a la vez, de una profunda tradición telúrica, y de los más audaces y significativos experimentos de la cultura universal”. 

El texto expresa la opinión oficial del SINAMOS (Sistema Nacional de Apoyo a la Movilización Social), cuyas siglas permitían un significativo juego de palabras (“sin amos”, entre otros). Esta oficina gubernamental fue creada en junio de 1971 por el Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas del Perú, régimen cuya primera fase (1968–75) estuvo encabezada por el general Juan Velasco Alvarado (1910–77). Su finalidad principal consistía en promover las organizaciones populares y movilizarlas de acuerdo con los lineamientos políticos oficiales. En el campo de la cultura y las artes, desempeñó un papel crucial organizando grandes eventos masivos con la colaboración de jóvenes artistas e intelectuales peruanos de izquierda. Algunos de ellos —como Jesús Ruiz Durand (n. 1940), José Bracamonte (1928–91), Francisco Mariotti (n. 1943), Luis Arias Vera (1932–2016) y Emilio Hernández Saavedra (n. 1940)— se incorporaron a la institución, concurrieron con sus obras y crearon la imagen gráfica de dichos encuentros de carácter popular. 

[Como lectura complementaria sobre el SINAMOS y Naylamp 72, véanse en el archivo digital ICAA los siguientes textos: (sin autor) “Revolución en la artesanía” (doc. no. 1139278); (sin autor) “Naylamp 72” (doc. no. 1139009); de Alfonso Castrillón, Leslie Lee y Carlos Bernasconi “Fundamentación para el dictamen por mayoría simple a favor del artista popular Joaquín López Antay” (doc. no. 1135896); de Alfonso Bermúdez “Premio a López Antay suscita controversias. Unos: consagración del arte popular. Otros: una cosa es arte y otra artesanía” (doc. no. 1135879); de Francisco Abril de Vivero, Luis Cossío Marino y Alberto Dávila “Artistas plásticos cuestionan premio” (doc. no. 1135960); y (sin autor) “‘No todos nos quieren ni en Lima ni en Ayacucho’: así comentó sobre cuestionamiento a premio” (doc. no. 1135930)].

[Además, consúltense otros textos, todos sin autor, sobre los festivales multidisciplinarios organizados por el SINAMOS, como sobre Contacta 72 (1972) en “Arte libertario” (doc. no. 1138949), “SINAMOS Contacta 72: a los artistas y artesanos del Perú” (doc. no. 1138964), “Contacta 72 será una experiencia de significación” (doc. no. 1138979) y “Pueblo y arte se dieron la mano en Contacta 72: gran cita en el Parque de la Reserva” (doc. no. 1138994); sobre Inkari (1973) en “Reintegración. Inkari: un reencuentro esperado” (doc. no. 1139039); y sobre ORAMS IX (1975) en “Arte y Pueblo” (doc. no. 1139024)].