Paul Ferdinand Schmidt enfatiza en su texto como constante una cierta “melodía del pesimismo” en la obra de Segall cuyo “fatalismo creador” adquiere “una expresión bastante particular y de un sentimiento trascendente”. Reconoce su cromatismo “deslumbrante” de su período brasileño y, de haber alguna alegría en lo que pinta, convive siempre con una tristeza que le es inmanente.
De su entraña brasileña, Schmidt detecta un enriquecimiento de la paleta con “motivos leves y menos abstractos” en las representaciones humanas y del paisaje. En resumen, Segall sintetiza un equilibrios entre “la representación cromático-constructiva y la fatalidad que le es inherente al sentimiento”.
Lasar Segall (1891-1957) es un artista nacido en la comunidad judaica de Vilnus (Lituania). Ingresó a la Escuela de Artes Aplicadas de Berlín, llegando a frecuentar, a principios de siglo, la Academia de Bellas Artes. Radicado en el Brasil desde 1912, donde ya residían sus hermanos; el Centro de Ciências e Artes de Campinas (SP) adquiere una obra suya: Cabeça de menina russa (1908). Vuelve a Europa durante los años de la Primera Guerra Mundial. Funda con pintores alemanes (como Otto Dix) el Dresdner Sezession – Gruppe 1919. A partir de una Exposición de Arte Ruso en Hannover (1921) establece vínculos con Kandinsky. En 1923 vuelve al Brasil. Decora con pintura mural el Pavilhão de Arte Moderna en la casa de la gran promotora de la Semana de Arte Moderna de 1922, Dona Olivia Guedes Penteado y lugar de reunión de intelectuales y de artistas.
[Como lectura complementaria, véase en el archivo digital ICAA, los textos de Lasar Segall: “Existe uma arte judaica?” (doc. no. 783319); “O expressionismo” (doc. no. 783352); Mangue (doc. no. 1110480); Poemas negros (doc. no. 1110581); “O que é a SPAM, que se inaugurou quinta-feira à noite” (doc. no. 783486); y “SPAM (Sociedade Pró-Arte Moderna) – Manifesto” (doc. no. 783455)].