Lo que analiza Brito sobre las obras de Eduardo Sued (n. 1925) y Jorge Guinle Filho (1947–87) trae a la mesa de discusión una lectura alternativa —ajena al lugar común del llamado “retorno a la pintura”— en torno al hacer pictórico que la década de los ochenta incentiva.
Operando en Río de Janeiro, Jorge Guinle fue uno de los protagonistas de la llamada “Geração 80”, no obstante que haya seguido un camino posterior independiente. Más allá de los alcances de su pintura, Guinle se destacó por su aporte intelectual como crítico de arte.
Eduardo Sued, a su vez, inicia la carrera artística en los años cincuenta, aunque sea a partir de sus pinturas concebidas a finales de los setenta cuando se dan a conocer su uso del color y la estructura en superficies rigurosamente planas y logra su reconocimiento definitivo en el Brasil. Brito escribió otras perspectivas críticas suscitadas por la obra de Sued como “Eduardo Sued: uma obra para a inteligência do olhar” [doc. no. 1111077].
El cearense Ronaldo [Correia de] Brito (n. 1951) es uno de los más importantes e influyentes críticos de arte en actividad en el medio brasileño. Publicó sus ensayos en libros, revistas y catálogos de exhibiciones, siendo además colaborador del periódico Opinião y uno de los fundadores de las revistas Malasartes y Gávea. Se trata de uno de los protagonistas, en los años setenta, promotor del reestudio del movimiento neoconcreto y su legado en el arte contemporáneo del Brasil.
Dentro de su amplia escritura, hay el texto sobre neoconcretismo [doc. no. 1091308]; además de textos sobre artistas de su interés como Tunga [doc. no. 1110561]; Amilcar de Castro [doc. no. 1111306]; Sérgio Camargo [doc. no. 1110496]; y Umberto Costa Barros [doc. no. 1110616], entre otros.