Tras haber recibido en 1951 el Gran Premio de la Primeira Bienal do Museu de Arte Moderna de São Paulo con su obra Dreiteilige Einheit [Unidad tripartita, 1948-51] —que se refiere a su concepto de Die gute form [La buena forma], basada en tres elementos: Schönheit, Form und Funktion [Belleza, Forma y Función]—, Max Bill visita el Brasil (dos años después) a invitación oficial del Ministério das Relações Exteriores. Da su entrevista al arquitecto y crítico de arte Flávio de Aquino, publicada en la revista Manchete (un semanario de gran circulación en el país) y, meses después, aparecerá impresa en las páginas de la revista HABITAT. Tanto la entrevista como la conferencia que presenta ante la Faculdade de Arquitetura da Universidade de São Paulo provocan una reacción polémica generalizada entre los arquitectos brasileños por el hecho de haber sido puestos en tela de juicio respecto a una falta de compromiso frente a la lógica de creación de la forma, y por el hecho de Bill recalcarles la “función social” de la arquitectura.
[Véase el debate surgido en el archivo digital ICAA: de Eduardo Corona “O testamento tripartido de Max Bill” (doc. no. 1110330); de Lucio Costa, “Max Bill e a arquitetura brasileira vistos por Lucio Costa: oportunidade perdida” (doc. no 1110331); y del propio Bill “O arquiteto, a arquitetura, a sociedade” (doc. no. 1110329)].