Este manifiesto constituyó el segundo pronunciamiento del Grupo Expansionista acerca de sus ideas sobre la transformación del arte y la vida. El texto fue publicado en octubre de 1967, en el marco de la segunda exposición expansionista realizada en el Ateneo de Caracas, nueve meses después de su primera muestra y de la publicación del primer manifiesto. En sus líneas generales, se plantea una reflexión sobre temas específicos: el papel que habría de jugar la tecnología en la materialización de su proyecto estético, tomando en cuenta el interés del expansionismo en generar dimensiones móviles alejadas de las soluciones bidimensionales y tridimensionales existentes. El discurso del manifiesto entra en sintonía con las vanguardias de la primera mitad del siglo, las cuales consideraban la transformación de la vida y de la sociedad a través del arte como una posibilidad real y alcanzable. Del mismo modo, el grupo se conecta con los ideales del constructivismo y de la arquitectura funcionalista, gracias a la consideración de la razón como elemento ordenador del mundo. En ese sentido, la aparición de estos postulados en 1967 podría parecer algo tardía; sin embargo, hay que destacar que algunos planteamientos sobre la obra transformable ya habían sido ideados y desarrollados por Omar Carreño (1927?2013) desde 1951, cuando se encontraba en París en el ámbito grupal de Los Disidentes. En 1956, el pintor había llevado a cabo reuniones en Venezuela para la formación grupal expansionista, pero esta iniciativa no llegó a concretarse.
El texto, por otra parte, recupera una reflexión sobre la percepción como dinámica fundamental de la obra transformable. Del mismo modo, el grupo toma distancia no sólo de las soluciones retinianas convencionales del cinetismo venezolano, sino de aquellas (más empleadas en Europa) que dependen de un motor para lograr una movilidad de la pieza. De nuevo, en esta segunda versión se proclama la interacción del espectador con la obra como la vía para la concreción del ejercicio perceptivo y creador.
Respecto a la primera proclama del grupo, véase “Expansionismo: Manifiesto 1” [doc. no. 1157270]; para una reflexión sobre el lenguaje plástico desarrollado por Omar Carreño, véase el ensayo de Víctor Guédez “La construcción de lo visual en Omar Carreño” [doc. no. 1157401]; y para un entrevista de Teresa Alvarenga con el artista, véase “Llegó el momento de decir: Omar Carreño lo hizo primero” [doc. no. 1157657].