El crítico e historiador de arte Jean Clay es uno de los estudiosos de prestigio internacional que han escrito sobre el artista cinético venezolano Carlos Cruz-Diez a lo largo de su trayectoria. Cruz-Diez se radica en Francia a partir de 1960, siendo que muchos textos y reseñas de prensa fueron escritos en francés originalmente y posteriormente traducidos al español. El presente ensayo (traducido por el escritor Alfredo Silva Estrada) se publicó, junto a la versión francesa, en el catálogo de la exposición Fisicromías de Carlos Cruz-Diez, en la Sala de Exposiciones de la Fundación Eugenio Mendoza, del 9 al 23 de octubre, en Caracas (1966). Un año antes, Clay había tenido la oportunidad de ver las Fisicromías de Cruz-Diez en la VII Bienal de São Paulo, y comenta brevemente la relación de estas con las obras de Soto, Le Parc y el artista japonés Ai-O, presentes en la bienal paulistana. Por lo tanto, el ensayo no debió ser escrito especialmente para la muestra de Caracas, aunque resultó pertinente. El texto en español aparece primero y con letra mayor, ambos intercalando tres diagramas asaz sencillos en la parte referida a las técnicas (color aditivo; color reflejo; color sustractivo).
Importa, en este ensayo, que el autor logra comunicar una de las características distintivas de Cruz-Diez frente a muchos artistas, inclusive ópticos y cinéticos: en sus obras se producen cambios más complejos en la medida en que el artista hace un descubrimiento clave. Esto nos lleva a pensar en paradigmas o descubrimientos transformadores en la ciencia; aquellos en los cuales muchas veces interviene el azar, seguidos de largos tiempos de experimentación; en este sentido, Cruz-Diez es un artista y un dedicado investigador.
Respecto a la obra de Cruz-Diez, consulte la entrevista de Plinio Apuleyo Mendoza “Entrevista a Cruz Diez [No imitamos, nos imitan]” [doc. no. 862938]; y el artículo de Víctor Guédez “Vertientes plásticas y estéticas en Carlos Cruz-Diez” [doc. no. 857000].