David Alfaro Siqueiros (1896–1974), después de ser expulsado de Estados Unidos, viaja a Montevideo, en febrero de 1933, y se establece en Buenos Aires, desde fines de mayo. En el Río de la Plata, Siqueiros aplica la experimentación técnica y polemiza a partir de los contenidos de su conferencia Los vehículos de la pintura dialéctico-subversiva, desarrollados en Estados Unidos.
Este documento integra un conjunto formado por los artículos publicados en Contra. La revista de los francotiradores, dirigida por el poeta Raúl González Tuñón, comunista no orgánico, ajeno a las directivas culturales del Partido Comunista. Por tal motivo, Contra funciona como una publicación de izquierdas, la cual estimula el debate militante de la vanguardias literaria y política. Se publicó entre abril y septiembre de 1933, prácticamente los meses de la estadía de Siqueiros en Buenos Aires, cuya presencia es asunto central en la publicación. La mayoría de sus colaboradores había trabajado en el diario Crítica.
Este documento integra un subconjunto de documentos de la revista Contra sobre la encuesta “¿El arte debe estar al servicio del problema social?” Cayetano Córdova Iturburu, crítico de arte de izquierdas, estuvo en algunos momentos cercano al Partido Comunista y había sido defensor de la renovación formal del arte (por ejemplo, la emprendida en la obra de Emilio Pettoruti). Por ello y a comienzos de los años treinta, este documento señala la radicalización de sectores intelectuales hacia un arte de compromiso político, poco después que el estalinismo empezara a dogmatizar con la implantación del realismo socialista como modelo de arte proletario. Participaron en la encuesta: Luis Waismann, Jorge Luis Borges, Nydia Lamarque, Oliverio Girondo y Cayetano Córdova Iturburu. (Veáse documentos 730253, 733324, 730272, 730263 y 733529.)
