El interés del texto radica en que la crítica y curadora de arte María Luz Cárdenas (n. 1952) pone en evidencia como el advenimiento de las nuevas tecnologías suscitó grandes cambios culturales, señalando cómo cada uno de los jóvenes artistas venezolanos que participan en la quinta edición del Salón Pirelli, al valerse de recursos tecnológicos, expresan distintas problemáticas propias de la contemporaneidad. Al igual que un documento digital, la obra de arte se puede leer de manera no secuencial o multisecuencial, creando relaciones entre sí, estructurando redes o entramados de significados. Los grupos curatoriales definidos por Cárdenas son los siguientes: (1) Manejo hipertextual en la escritura y estructuración de la obra de arte, basado en la teoría del texto electrónico realizada por el sociólogo norteamericano Ted Nelson (n. 1937) durante los años sesenta haciendo referencia a diferentes vías de acceso, formas de recorrido, redes, tramas y trayectos que implican abiertas lecturas con accesos múltiples de percepción y sentido lúdico que se contraponen a cualquier narración lineal; (2) Al alterarse el espacio de fundación y estructuración de la imagen, el empleo de recursos tecnológicos y discursos alternativos crea un nuevo régimen de visibilidad, edificando así nuevas relaciones con lo visible y obligando al espectador a construir inusitadas formas de percepción; (3) Articulación de otros parámetros en relación al tiempo y al movimiento, siendo que el uso de la tecnología como base del proceso de creación artística altera las nociones de tiempo y movimiento, cambiando el modelo de duración y contemplación de la obra; ésta se desplaza a otra temporalidad que exige del espectador una atención diferente a la de la “contemplación” tradicional, generando un lúdico acceso espacio-temporal por la vía digital. Esta fue la premisa bajo la cual se organizó el último salón Pirelli realizado bajo la visión curatorial de Cárdenas, quien fue la responsable del mismo desde su creación, en 1993. El Salón Pirelli representó una institución de suma importancia para el arte contemporáneo en Venezuela, al ser la ocasión por excelencia para descubrir y dar a conocer los protagonistas del arte actual, con reconocimiento tanto nacional como internacional.
[Respecto a otros textos de Cárdenas sobre el Salón Pirelli, consúltese el archivo digital ICAA: “Nuevas realidades, nuevos conceptos para un salón de jóvenes” (doc. no. 1161393); “De la ilusión óptica a la desilusión cultural: Arte desde el exilio: Enfoque metodológico y pautas generales de aproximación al II Salón Pirelli de jóvenes artistas y lenguajes” (doc. no. 1161345); y “Aproximación al III Salón Pirelli” (doc. no. 1162019); además del texto de la critico y curadora de arte venezolano Ruth Auerbach, “Salón Pirelli: Primera aproximación al arte joven en la década de los noventa en Venezuela” (doc. no. 1161411)].
