La exposición Sin fronteras/Arte latinoamericano actual presentada por el Museo Alejandro Otero (Caracas, 1996) con la curaduría de Miguel Miguel constituye un evento expositivo de importancia sobre el arte latinoamericano contemporáneo realizado en Venezuela; además de difundir la obra de 31 artistas del continente, planteó una reflexión necesaria y una redefinición urgente del arte de América Latina.
En su texto, el curador analiza el arte latinoamericano actual como fenómeno de conjunto, y puntualiza que sustenta su opinión de acuerdo a lo realizado durante los últimos años (1980-90) por los artistas jóvenes latinoamericanos, involucrándose inclusive en su promoción. Es importante la visión que ofrece el curador sobre el fenómeno actual de este arte, reivindicadora de valores “positivos” pertenecientes a una cultura occidental. Miguel describe un panorama totalmente diferente al de otros críticos que, aún actualmente, sostienen posiciones críticas “negativas” que enfatizan una dolorosa imagen de América Latina: territorio dependiente y siempre a la saga de las vanguardias y del reconocimiento mundial. El suyo es un discurso sobrio en sus apreciaciones optimistas; no se puede obviar, afirma Miguel, la equivocada tendencia impuesta desde los grandes ejes de poder difusor, de asociar el arte latinoamericano a cierto “realismo mágico” de connotaciones surrealistas o mitológicas, o con expresiones propiamente folclóricas o “fantásticas”. [Véase al respecto, como complemento de esta lectura, en el archivo digital ICAA el ensayo paradigmático de 1992 escrito por Mari Carmen Ramírez, “Beyond ‘The Fantastic’; Framing Identity in U.S. Exhibitions of Latin American Art” (doc. no. 1065386). Consúltese también los textos “Latin American art’s U.S. Explosion” de Shifra M. Goldman (doc. no. 1065368); y “‘Fantastic’ are the others” de Aracy A. Amaral (doc. no. 776644). Además, véase los textos “Art of the fantastic” de Holiday T. Day y Hollister Sturges “Prólogo” (doc. no. 1065611) y “Introducción” (doc. no. 1065330). Miguel considera que, definitivamente, hoy este panorama está cambiando, y que muchos jóvenes desarrollan una obra trascendente en sus países de origen sin sentir la necesidad de emigrar a los centros de legitimación, mercado y poder. El texto no abandona su visión de conjunto; por lo tanto no se detiene en el análisis de obras de los participantes.
La exposición incluyó obras de 31 artistas pertenecientes a colecciones venezolanas: Aziz Cucher, José Bedía; María Fernanda Cardozo, Sigfredo Chacón, Eugenio Dittborn; Arturo Duclos, Eugenio Espinoza, José Gabriel Fernández, Héctor Fuenmayor, Julio Galán, Félix González-Torres, Víctor Grippo, José Antonio Hernández-Diez, Alfredo Jaar, Kcho, Guillermo Kuitka, Jac Leirner, Fabián Marcaccio, Ana Mendieta, Ernesto Neto, Roberto Obregón, Gabriel Orozco, Alfredo Ramírez, Rosângela Rennô, Miguel Ángel Ríos, Doris Salcedo, Andrés Serrano, Ray Smith, Tunga, Meyer Vaisman, Alfred Wenemoser. El catálogo contiene también el ensayo “Imaginando territorios: Reflexiones dispersas sobre arte en (Latino) América” (1996) escrito por Mónica Amor (doc. no. 1155284).