Además de haber sido uno de los curadores de la Primera Bienal de São Paulo (1951), el crítico de arte, historiador y curador Walter Zanini (1925−2013) fue el primer director del Museu de Arte Contemporânea (vinculado a la USP), cargo que ocupó de 1963 a 1978, donde se destacó por incentivar la producción de nuevos artistas así como de aquellas manifestaciones artísticas que eran marginalizadas: desde propuestas tecnológicas al arte conceptual, pasando por el uso de los multimedios a través de poéticas visuales. Fue también profesor de la ECA-USP (Escola de Comunicações e Artes da Universidade de São Paulo).
En este texto, Zanini elabora una defensa de la curaduría como actividad crítica, debatiendo, incluso, la necesidad de una política a largo plazo para la institución paulistana sin dejar de insistir en la abolición de representaciones nacionales, sustituidas, a su vez, por una organización basada en afinidades de lenguaje y la realización de un Núcleo Histórico, de gran importancia para la formación de un público en el país. Tales son los temas reincidentes en el debate en torno a la entonces tambaleante Bienal Internacional de São Paulo. Cabe subrayar la reacción crítica desatada contra la curaduría “tripartita” de Stella Teixeira de Barros, Carlos Von Schmidt y João Cândido Galvão para esta vigésima versión del evento paulistano (1989) y su insistencia en las representaciones por país.
Las Bienales XVIII y XIX de 1985 y 1987 ya habían experimentado cambios radicales pertinentes a lo que el presente documento revela. Estos dos certámenes, a cargo de la curadora Sheila Leirner, insistieron por vez primera en los temas de lo universal y de la participación curatorial a niveles de protagonismo [véase doc. no. 1111107 y doc. 1110910]. Para más información sobre el tema planteado por el profesor Zanini, consulte la entrevista de Agnaldo Farias a uno de los curadores de la vigésima primera versión bienal: “João Cândido Galvão: ‘fiz uma Bienal com transgressores’” [doc. no. 1111317].