Importante reflexión sobre la problemática surgida en los vínculos que se establecen entre la producción de obra de cuño experimental, su nexo con las instituciones del arte, así como el público y el mercado del arte. Los proyectos de carácter público que están en el trasfondo de este escrito demandan, inobjetablemente, alianzas, modelos de actuación y administración de la cultura. Motivo por el cual la autora hace énfasis en una crítica ideológica al mercado del arte.
Aracy A. Amaral (n. 1930) es historiadora y crítica de arte. Desde 1975 ha venido desarrollando un interés específico sobre el arte en América Latina, habiendo participado del Simposio de Austin, en Texas, y desde entonces allegándose a críticos latinoamericanos tales como el argentino Damián C. Bayón (1915−90) —organizador del evento—, el peruano radicado en México Juan Acha (1916−95) y Marta Traba (1923−83), la argentina inicialmente operando en Colombia. Desde ese contacto, los problemas de “identidad”, así como la injerencia de “lo popular” pasan a vertebrar buena parte de sus escritos. En este caso, aunque la invitación específica colombiana escapa a sus preocupaciones habituales, tanto el “no objeto” como el conceptualismo fueron problemas fundamentales de años anteriores internacionalmente.
El antecedente más radical al respecto es el propio manifiesto redactado en 1960 por Ferreira Gullar, “Teoria do não-objeto”, y publicado en el Suplemento Dominical del Jornal do Brasil como un aporte vertebral a la II Exposição Neoconcreta [véase doc. no. 1091374]. La propia Aracy traza su derrotero histórico en relación a los “Aspectos do não-objetualismo no Brasil” [doc. no. 1111221].
La revista Arte em São Paulo tuvo como punto de partida la posibilidad de gestar una manifestación periódica que interfiriera de manera independiente en el circuito del arte brasileño. Al inicio, su director fue el artista Luiz Paulo Baravelli, y la función directiva la condujeron, años más tarde, las periodistas Marion Strecker Gomes y Lisette Lagnado, también curadora. La revista tuvo un total de 37 números, llegando hasta el público en el año de 1987.