El sociólogo André Lemos analiza las características de la cibercultura y, muy en especial, la producción artística realizada con medios electrónicos y digitales. El arte expresa siempre lo imaginario de su época, siendo que el arte posmoderno se diferencia de los movimientos del alto modernismo al optar por formas eclécticas y fragmentarias; o sea, una estética anárquica que  se aleja, definitivamente, del imaginario racionalista y futurista de la modernidad. Un arte abierto, rizomático y interactivo, donde autor y público se mezclan de manera simbiótica. A juicio de Lemos, la edad de la red (internet, comunidades virtuales), aliada a la posibilidad de sucesivas recombinaciones de informaciones es el motor primo del “ciberarte”. El arte electrónico, a su vez, sería el arte de la comunicación. En esa civilización regida por “lo virtual”, los bits (de información) substituyen a los átomos donde progresivamente se desmaterializa la naturaleza. El arte electrónico y/o digital estaría tocando el meollo de la civilización virtual: interactividad y posibilidades hipertextuales, circulación (virótica) por redes planetarias: para comprender el arte de finales del siglo XX hay que entender el imaginario de la cibercultura. La imagen ya no representa más; sino que presentifica un simulacro generado por cálculos matemáticos; no existe la representación sino la simulación. Tratase, en esencia, de la cultura de lo híbrido, de la fusión de lo orgánico con lo inorgánico cuya figura máxima es el cyborg (cuerpo biológico e implantes tecnológicos, los más diversos).

Oriundo de Rio de Janeiro, André Lemos (n. 1964) opera en el área de sociología, adoptando como especialización la con cibercultura; a partir de lo cual se centra en temas en torno a nuevas tecnologías, arte electrónica y cultura contemporánea, ciberespacio y comunicación. De hecho, ES el coordinador y autor de diversos blogs, además de editar revistas de ese ámbito: 404notfound (Universidade Federal da Bahia) e Cibercultura (Instituto Itaú Cultural, São Paulo). Es miembro de varias comisiones científicas, en publicaciones tanto brasileñas como internacionales; entre esas revistas se cuentan: Sociétés (Francia), Canadian Journal of Communication, Wiy el Journal of Mobile Media (Canadá) en su pais y en el exterior formo parte de jurados en eventos tales como Ars Electronica (Linz, Austria), Memefest y el Prêmio Sérgio Motta (Brasil), entre otros.

Además de la vasta obra publicada por Gilbertto Prado: “Utilizações artísticas de imagens em direto na world wide web” [véase archivo digital ICAA (doc. no. 1111125)]; “Experimentações artísticas em redes telemáticas e web”, (doc. no. 1111290); “Os sites de arte na rede internet” (doc. no. 1111124); y “Cronologia de experiências artísticas nas redes de telecomunicações” (doc. no. 1111289). Consúltese al respecto, además, otra perspectiva complementaria en “Mundos virtuais e vidas artificiais” de Suzete Venturelli (doc. no. 1111136);  

Vale señalar aquí el trabajo pionero de arte electrónica que desarrolla el poeta concretista Waldemar Cordeiro (1925-73) bajo el nombre de “arteônica”, valiéndose, ya en 1969, de los enormes computadores tanto de la UNICamp (Campinas, SP) como de la Universidade de São Paulo. Hay los textos de 1970, “Computer plotter art - primeira mostra na América Latina” (doc. no. 1110487) y, del año siguiente, “Arteônica” (doc. no. 1110836).