Referencia de Mário Baratta sobre la quietud con que se vivía en el mundo artístico de Fortaleza (capital del estado de Ceará) el período aciago de la Segunda Guerra Mundial. Entre algunos extranjeros que ahí radicaban, cobra conocimiento del artista suizo Pierre Chabloz. Este, originalmente llegado al Brasil para trabajar en asuntos del caucho (hule), poco después termina involucrándose en el fomento de la cultura. Baratta narra sus encuentros con él para cenar y tocar música, o bien para dibujar con modelo al desnudo. Diametralmente ajenos a la conflagración mundial (en Europa y en Asia), la vida transcurría con plena normalidad en ese enclave del noreste brasileño e, irremediablemente, los artistas acababan relacionándose con las propias modelos con las que habían tenido sesiones de dibujo.

El presente texto de Mário Baratta, artista y crítico de arte, describe, sin pretensión alguna, el cotidiano artístico de Fortaleza (capital del estado de Ceará) durante la época de la Segunda Guerra Mundial. Pone en destaque la participación de algunos extranjeros en ese ambiente de provincia; en especial, debido a la enjundia y aporte de Pierre Chabloz, quien abrió el espacio local con la fundación de la SCAP (Sociedade Cearense de Artistas Plásticos). El proyecto no solo fortalece la cohesión artística interna, sino que le brinda a sus miembros, por primera vez, un alcance a nivel nacional.

Mário Baratta nació en Río de Janeiro (1914–83) y se mudó a Fortaleza en 1932 para convertirse “en un cearense de por vida”, pasando a ser una figura emblemática de la cultura local. Se articuló como crítico de arte, siendo figura vertebral para la fundación del Centro Cultural de Belas Artes en Fortaleza, entidad responsable de los primeros salones de arte como el Salão Cearense de Pintura (1941) y después el Salão de Abril (1943). Debido a problemas financieros en 1944, surge la SCAP (Sociedade Cearense de Artes Plásticas) para reactivar el Salão de Abril en 1946, evento creado para presentar artistas locales en diálogo con lo que se producía artísticamente en el Brasil de entonces, teniendo así un alcance nacional

[Como lectura complementaria, véanse en el archivo digital ICAA los siguientes textos de Mário Baratta: “Aldemir Martins e a pintura” (doc. no. 1110782); “Antonio Bandeira e a pintura” (doc. no. 1110781); “Carta a Mario de Andrade” (doc. no. 1110783); “De como deve ser visto o binômio Clã-SCAP” (doc. no. 1111385); “Exposição cearense” (doc. no. 1111388); y “II Salão de Abril” (doc. no.1111387)].