El Centro Cultural Ricardo Rojas, fundado en 1984, es un organismo de extensión cultural de la Universidad de Buenos Aires donde se desarrollan diversas actividades tales como cursos, charlas, ciclos de cine, etc. En 1989, tras algunos años de su apertura, se creó, en el hall de entrada, La Galería del Rojas dirigida por el artista y crítico de arte Jorge Gumier Maier, sumándose, poco después, Magdalena Jitrik, como colaboradora. Espacio marginal dentro del campo artístico porteño, en aquella época, el centro comenzó a adquirir importante visibilidad entre 1991 y 1992. Los artistas de “el Rojas” empezaron a ser incorporados en la agenda de espacios clave de exhibición, tales como el ICI (Instituto de Cooperación Iberoamericana), el Centro Cultural de España o bien la Galería Ruth Benzacar. La referencia a poéticas del pasado, como el pop, el minimal, el arte concreto (bajo reformulaciones personalísimas), aunado a elementos del kitsch, han servido para caracterizar recursos expresivos de dichos artistas. Hacia fines de la década, los artistas que integraron “el grupo del Rojas”, fueron comprendidos de manera general como los representantes del “arte argentino de los noventa”.
El Espacio Giesso fue uno de los lugares “alternativos” de exhibición durante los años noventa. Muchos jóvenes artistas montaron sus obras en dicha sala.
Jorge Gumier Maier, Alfredo Londaibere, Benito Laren, Omar Schiliro fueron parte lo que se dio en llamar el “grupo de El Rojas”; es decir, aquellos que la Galería del Centro Cultural Ricardo Rojas alojó entre mediados de 1989 y los primeros años de la década de noventa.
Este documento reviste suma importancia como registro de una de las exhibiciones más trascendentes de algunos de los artistas del “grupo del Rojas”, en cuanto a la repercusión crítica que desató la reseña hecha por Jorge López Anaya para el diario La Nación (véase: “El absurdo y la ficción en una notable muestra”, 1º de agosto de 1992, registro no. 768308). En dicha reseña, el autor empleaba el término light para describir el carácter de las obras presentadas; término que generó, por sus posibles connotaciones, numerosas discusiones y debates dentro del campo artístico argentino a lo largo de esa década.
Asimismo, este documento cobra importancia si se considera que la mayor parte de las exposiciones de los artistas de “el Rojas”, ya sea en la misma galería o en otros espacios relativamente similares, para esta temprana época, carecieron de catálogo. En este sentido, las tarjetas de invitación son, muchas veces, uno de los pocos registros materiales que han quedado de tales exhibiciones.