A modo de manifiesto, el autor despliega una lectura crítica sobre el estado de cosas en el ámbito artístico del continente y, sobre todo, en torno a la cultura. Alberto Pérez se define bajo la noción plural de “americano”, “hispanoamericano”, “indoamericano” y derivaciones. Elabora un  ejercicio transversal para llevar a cabo este autoconocimiento que implica imaginar un futuro de múltiples geografías en un único espíritu y propósito, enfrentar mitos originarios y los que se construyen sin cesar. Se propone aprovechar herencias culturales desechando “importaciones rancias”. Esta propuesta es, en primera instancia, literaria; ya en referencia a la pintura y sin pretender ningún replanteamiento local, lo americano “vive a expensas de las resonancias, esfuerzos, descubrimientos de los nuevos espacios plásticos que nos llegan de Europa o Estados Unidos”, lo cual dificulta el desarrollo de una propuesta local. A su juicio, tanto la obra de arte como cualquier producto cultural no nace en un taller ni tampoco es fruto de inspiración divina sino derivada de mutaciones y choques, encuentros y reacciones que se dan en medio del devenir cultural. Tal sería la principal característica para definir “un arte específicamente americano”, su particularidad creativa en relación a su contexto.

El texto del artista y profesor Alberto Pérez (1926-99) es parte del catálogo Chile Vive, exposición realizada en 1987 en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. El propósito de la muestra fue exponer en España la producción artística y cultural desarrollada en Chile en las áreas de fotografía, arquitectura, pintura, escultura, literatura y medios de comunicación entre 1973 y 1986; esto es, en los años marcantes del autoritarismo bajo una dictadura fascista. El principal objetivo era hacer ver que tales producciones surgieron, de una u otra forma, a pesar del adverso panorama implantado por el régimen a través de la censura.

Por medio del texto “Un Arte específicamente Americano”, Pérez enfatiza la importancia de reflexionar a partir de una mirada local, cuestionando y distanciándose de marcos europeos y norteamericanos. Para tanto, define la obra de arte como “producto de mutaciones y choques, encuentros y reacciones” suscitadas a lo largo del amplísimo y complejo devenir cultural. En esta propuesta de Pérez es posible encontrar reminiscencias con lecturas descolonizadoras iniciales [ver Archivo Digital ICAA (doc. no. 784839)].

Se comprendía una amplia investigación y conocimiento sobre el panorama latinoamericano y el texto de Pérez mezcla la participación política con la praxis investigativa y artística. Para una mayor información sobre tales enfoques, es oportuno mencionar en particular “Alberto Pérez” (doc. 756960), ensayo que escribe Francisco Brugnoli.