El artículo está plagado de inconsistencias; emanado de una información no oficial (“un empleado del centro artístico”), de rumores y datos erróneos (“El Taller Libre de Arte fue creado en 1946”, en vez de 1948, cuya “finalidad primordial era facilitar la formación artística de personas con aptitudes que no habían tenido oportunidad de adquirirla”) y de ideas que quedan en el aire, causando incertidumbre (“Las clases en el Taller han comenzado en años anteriores el 15 de septiembre pero...”). Todo ello da muestra de la crisis y conflictividad en la que está sumida dicha institución venezolana. Por el contexto en que se ubica, es viable decir que el artículo señala la desaparición definitiva del TLA cuatro años después de instituido (1952). En efecto, las clases estuvieron suspendidas por varios meses debido a reparaciones efectuadas en la planta física y a la necesidad de seleccionar nuevos profesores. A partir de este momento, se sustituye por otra institución: el INCIBA.
Para más textos sobre el TLA, consulte el prólogo de Bernardo Chataing que acompaña la primera exposición colectiva del TLA, “Texto presentación” [doc. no. 1101666]; y el prólogo donde el colectivo TLA se declara interesado en la invención y la libertad creativa, “Exposición de cuadros abstractos 1948: El movimiento moderno de abstracción ? invención – concreción” [doc. no. 1101635].