En el texto que acompañó la exposición Esto no es un martillo, de Diana López (n.1968), el crítico y curador Jesús Fuenmayor distingue los rasgos que caracterizan su obra hasta convertirla en algo asaz complejo. Comenta la exposición fotográfica y replantea curatorialmente el sistema utilizado por López sobre el papel que juega cada participante en las series expuestas que la ilustran. De esta manera, Fuenmayor revela vínculos entretejidos entre la artista, el operador de la cámara fotográfica, el objeto fotografiado y el espectador. Por lo tanto, el curador pone en evidencia el uso estratégico de herramientas conceptuales ligadas a la comunicación en el arte, tales como el origen de la idea, la “instrucción artística” y su posterior aprendizaje por las partes que conforman el proceso creación/recepción. El análisis hecho desde la práctica curatorial nos brinda suficientes datos para conocer a fondo el trabajo de López al hacer un recorrido por la obra y sus intereses en juicio. Por otra parte, revela ciertas coincidencias con planteamientos abordados por grandes artistas del siglo XX, como es el caso de la obra del artista alemán Joseph Beuys (1921–86) quien planteaba la posibilidad del artista ser “todos artistas”; por lo tanto, se esboza así la idea de que cada obra es parte esencial y participante.
Se encuentra disponible en el archivo digital ICAA otro texto del autor sobre la misma artista; en este caso por su participación en la exposición anual del PS1 Institute of Contemporary Art de Nueva York [véase “Diana López en PS1” (doc. no. 1163934)].
