Ensayo de Elsa Flores sobre el comunicador, dramaturgo y performista venezolano Marco Antonio Ettedgui en el que profundiza en su actividad como artista corporal. Según la autora, en los eventos de Ettedgui la función de comunicar y educar tiene tanta o más importancia que la propia estética. Flores aborda dos temas básicos: el arte como información-comunicación y el cuerpo como código y mensaje del arte. Apoya sus ideas en planteamientos de estudiosos de la  teoría de la información y de la comunicación. Destaca que la relación del hombre con su cuerpo, en la historia de la civilización occidental, se ha caracterizado por el rechazo y los tabúes; define a Ettedgui como creador dentro de un lenguaje de arte corporal de contenido antropológico y sociológico, perteneciente al arte conceptual. Comenta la “acerbada crítica” dirigida por el artista, en su mayor parte, a denunciar y concientizar al público sobre la situación del ciudadano común en Venezuela.

La crítica de arte Elsa Flores, originaria de la Argentina, vivió y trabajó en Venezuela durante los años setenta y comienzo de los ochenta, tiempo en que desarrolló una fructífera actividad en la crítica y en la docencia. Flores es quien ha estudiado con mayor profundidad la obra de Marco Antonio Ettedgui (1958–81), especialmente en el campo del performance. En el presente ensayo —el más completo que se ha escrito sobre esta faceta del artista venezolano— analiza su actividad como artista corporal de manera exhaustiva. Su desempeño fue breve en el tiempo pero, proporcionalmente, rico en su producción (entre 1979 y 1981, año en que el artista fallece trágicamente en escena). Es importante la vasta información teórica que aporta Flores sobre autores (especialistas en antropología, semiótica, lingüística y otras ciencias sociales), así como el análisis de sus planteamientos. Siendo la autora docente de artes plásticas y especialista en semiótica, su selección de autores y teorías es amplia en número y a la vez es reflejo de las teorías y métodos de análisis estructuralistas, en boga en los setenta y ochenta.

En cuanto al análisis de la obra de Ettedgui, Flores acude a conceptos claves para la comprensión del arte contemporáneo, especialmente del arte conceptual como es el caso de Obra abierta (1962) de Umberto Eco, o las clasificaciones sobre tipos de obras de arte no convencional de Jorge Glusberg (Argentina) o de Simón Marchán-Fiz sobre el arte conceptual. Las conclusiones  de Flores sobre la obra de Ettedgui son, por lo tanto, sólidamente fundamentadas y, en este sentido, es un texto didáctico aunque dirigido al público especializado.

Otro punto de interés en este ensayo es que contiene el registro completo de los performances y “eventos informacionales” de Ettedgui, contextualizándolo dentro de la generación de los primeros conceptuales venezolanos. Flores menciona estrictamente a los importantes. El texto

“Entrada al cuerpo del cuerpo” introduce la tercera parte del libro ETTEDGUI, arte-información para la comunidad (Caracas: Ediciones Oxígeno, 1985), única publicación que reúne los escritos de Ettedgui (poesía, teatro y performance). El libro contiene otros dos ensayos: “Entrada al cuerpo del texto” de Alejandro Varderi y “Entrada al cuerpo del teatro” de Juan Calzadilla.

Para otros textos de Ettedgui, consulte “Hospitalización por cálculo renal: evento informacional de la serie ‘Salones de Belleza’ llevados a la práctica por su artista favorito Marco Antonio Ettedgui” [doc. no. 865734] y “Feliz cumpleaños, Marco Antonio: evento informacional de Marco Antonio Ettedgui a partir de la arquitectura de la Galería de Arte Nacional como texto artístico tradicional” [doc. no. 1152597].