En ese mismo número, la Revista Pan (1935?40) publicó, junto con el texto del editor Enrique Uribe White (1898?1983), la versión en español de la presentación que Werner Suhr, el director de Gebrauschsgraphik, hizo del fotógrafo Luis Benito Ramos (1899?1955) para el público alemán [véase: “Luis B. Ramos”, doc. no. 1075878]. Sin duda, este documento es excepcional pues evidencia el reconocimiento a un fotógrafo colombiano, por una publicación internacional, y la obra testimonial del país en los años treinta.
Ramos estudió pintura en Bogotá, viajó a París (1928) con una beca, convirtiéndose allí en un profesional de la fotografía. Entre 1930 y 1933, colaboró con revistas francesas, aspecto que aún no ha sido investigado por ningún historiador local. De regreso a Colombia, en 1934, empezó a publicar reportajes fotográficos en torno a temas escogidos libremente por él.
La carrera fotográfica de Ramos tuvo un desarrollo vertiginoso. Varios periódicos y revistas colombianas se disputaron su trabajo, el cual fue publicado en los diarios colombianos El Tiempo y El Espectador así como también en las revistas Cromos, El Gráfico, Pan y Estampa. En aquella época, sólo esporádicamente se les daba el respectivo crédito a los fotógrafos. Lo usual era dejar las fotos en el anonimato y se acostumbraba —sobre todo cuando un fotógrafo trabajaba con exclusividad para un periódico o revista— poner de lado el nombre del verdadero autor de la nota gráfica para hacer figurar en su lugar el de la propia publicación. Ramos acabó con esta práctica, logrando que sus fotos y reportajes aparecieran anunciados como lo que eran: obras de Ramos.