Comúnmente, se tiene por cierto que el TLA (Taller Libre de Arte) tuvo su existencia en el período que va de 1948 a 1952; así lo constatan historiadores del arte venezolano, críticos y aún sus más connotados miembros. No obstante, Régulo Pérez (El Nacional, 25 de agosto de 1951) hace declaraciones a finales de ese año en la prensa denunciando el letargo en que ha caído el taller, anunciando su inminente crisis. En esas fechas, a partir del nombramiento interino de Louis Rawlinson (tras la partida para París de su director Alirio Oramas), esta crisis se hizo evidente. La designación de Rawlinson fue abiertamente cuestionada por los miembros del TLA, nombrándose una junta reorganizadora. En efecto, en la junta reorganizadora, que permanecerá hasta la designación de un nuevo director en 1953, queda al frente José Fernández Díaz. En 1952, el TLA cambia de local (esquina de Cipreses, en Caracas) y continúa con sus exposiciones y eventos. Hacia 1953, el TLA cambia de local nuevamente y es nombrado como director el pintor Martín Leonardo Funes, con cuya nueva directiva los intentos de José Fernández Díaz de cambiar el perfil del TLA a un centro académico de enseñanza artística y talleres de artistas se consolidan, perdiéndose la tónica que le dio origen. Con estos eventos y su nuevo perfil, la historia del TLA se torna oscura; no obstante, hubo un intento, a mediados de los sesenta, por reorientarlo. Dicho proyecto fue elaborado y elevado a la consideración del INCIBA (Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes) por Alirio Oramas (miembro fundador del TLA); sin embargo, el amplio documento de reorganización no fue discutido y (en agosto de 1967) fueron destituidos todos los profesores del TLA, evento con el que concluye esta experiencia.
[Para más textos sobre el TLA, consulte en el archivo digital ICAA los prólogos tanto de Bernardo Chataing sobre la primera colectiva del TLA, “Texto presentación” (doc. no. 1101666), como el de Luis Berroterán, “Texto presentación 3 Salón de jóvenes pintores del Taller Libre de Arte” (doc. no. 1063067); el texto (sin autor) “Es necesario reorganizar el Taller Libre de Arte” (doc. no. 1051925); el texto (sin autor) “No esta clausurado el Taller Libre de Arte” (doc. no. 1167909); y el artículo donde se señala su desaparición y substitución por otra institución, el INCIBA, “Han sido destituidos todos los profesores del Taller Libre de Arte” (doc. no. 1172267)].