Este texto, de la periodista colombiana Beatriz de Vieco, ofrece una ilustración de las obras conceptuales de Bernardo Salcedo en la muestra inaugurada en noviembre de 1970 en la Sala Vásquez Ceballos de la Biblioteca Nacional de Colombia (Bogotá). En ella se destaca la presencia de la “escultura” que ese mismo año obtuvo el Premio de la Bienal de Coltejer (Medellín). De modo paralelo a la descripción de las obras, la periodista aclara sus vínculos con la que denomina la más osada vanguardia. Relaciona sus orígenes duchampianos y su empeño en favorecer la idea antes que el asunto tangible o, incluso, el material. En la fotografía y en el pie de foto que acompañan el texto aparece Salcedo junto a su “escultura” (Hectárea de heno) esparcida por el piso de la sala. Se afirma que la noche de la inauguración hubo un happening cuando varios jóvenes improvisaron un baile alrededor suya.

Este texto y la imagen que lo acompaña son una de las escasas presentaciones que pueden consultarse en archivo sobre la que pudiera considerarse la primera obra textual de Bernardo Salcedo (1939–2007). La “escultura” a la que se refiere Beatriz de Vieco es la Héctarea de Heno (1970); obra referencial en la carrera del artista y en la historia del arte en Colombia, en la medida en que puede entenderse como una de las expresiones tempranas de instalación en el país. Este trabajo, presentado por primera vez en la Bienal de Coltejer (Medellín, 1970), en la que fue premiado con una “bolsa viajera”, fue reinterpretado de manera más libre en la Sala Vásquez Ceballos. Allí, se esparcieron por el piso las 500 bolsas de polietileno numeradas que guardaban heno en la Bienal de Coltejer donde se apilaron en forma de montaña. De esta manera, el aroma del heno funcionó como evocación y como idea. Por estar dedicada a los niños, esta exposición tuvo un montaje particular y festivo; no sólo se brindaba en ella la posibilidad de jugar con las bolsas esparcidas por la sala, sino que, como se puede observar en la foto, los cuadros se instalaron por debajo de la tradicional línea de horizonte expositivo. En esta exposición se presentaron por primera vez obras muy poco comentadas y conocidas de Bernardo Salcedo, entre las que se encuentran las seriesPlanas y Castigos, Sumas, Restas y Multiplicaciones (1970). Igualmente, estuvieron presentes en esta muestra ejercicios del artista que nunca se volvieron a exponer, tales como bocetos de cajas por construir, un intercambio de comentarios por vía telegráfica sobre una obra de arte y, finalmente, recortes de noticias que el artista “incompletó” con el objeto de resaltar tendencias y manías de la prensa. Si bien se trata solamente de un texto noticioso, éste ofrece también la posibilidad de interpretar la novedad representada por este tipo de obras en el ámbito artístico colombiano; así como las vías de legitimidad que se les brindaba a través de advertencias de la periodista como la siguiente: “El conjunto evidentemente representa una muestra de arte conceptual, situado hoy en la cúspide del movimiento artístico del mundo civilizado”.