Ciudad Solar fue una experiencia de gestión cultural sin precedentes en Colombia; en particular, porque un grupo de jóvenes artistas apostó en un proyecto de creación y gestión a desarrollarse viviendo en comunidad. Este documento presenta los objetivos y organización de la primera etapa de Ciudad Solar (1971–73). En teoría, el proyecto pretendió impulsar las artes gráficas, el cine y la fotografía con la creación de una sala permanente de exposiciones y otra de espectáculos (teatro, títeres, poesía, literatura, danzas, conferencias, concursos, mesas redondas, seminarios, etc), un Cine-Club, un laboratorio de fotografía y tanto cinematografía experimental como una revista. Hernando Guerrero (nac. 1948), presidente de la Junta Directiva, consiguió el patrocinio de su familia y obtuvo en préstamo la casa (necesaria) del barrio La Merced para la sede de Ciudad Solar. Del conjunto de proyectos escritos en el papel, sólo se llevaron a cabo: el Cine-Club de Cali que lo coordinó Andrés Caicedo (1951–77), Luis Ospina (nac. 1949), Ramiro Arbeláez (nac. 1952), Hernando Guerrero y Jaime Acosta; en la Galería de Arte, Miguel González (nac. 1950) programó un año de exposiciones; además, el grabador Phanor León (1944–2006) coordinó el taller de serigrafía; hubo el laboratorio de fotografía que donó Carlos Mayolo (1945–2007) que estimuló el trabajo de fotógrafos tales como: Eduardo Carvajal (nac. 1949), Gertjan Bartelsman (nac. 1949), Juan Fernando Ordóñez (1952–77) y Francisco “Pakiko" Ordóñez (nac. 1949). Por último, Ciudad Solar produjo la película (inconclusa) Angelita y Miguel Ángel, codirigida por Caicedo y Mayolo; una experiencia que consolidó el trabajo en comunidad y produjo, a la vez, una ruptura entre ambos directores por tener enfoques distintos acerca del desenlace de la trama. En 1973 se desintegró el grupo. La convivencia en la popularmente conocida como “Ciudad Sollar” (sollar o trabar: estado de aletargamiento o excitación que produce la marihuana) y el viaje de Guerrero a Europa quebrantó el proyecto. En el barrio de El Peñón de Cali, “Pakiko” Ordóñez asumió la dirección de la nueva etapa (1974–78), con la colaboración de su hermano Juan Fernando y los antes mencionados Herrera, Bartelsman y León.