Antonio Martorell (Santurce, 1939) se entrenó en el Taller de Gráfica del Instituto de Cultura Puertorriqueña, bajo la dirección de Lorenzo Homar. A través de su vida artística, Martorell se ha desempeñado como escenógrafo teatral, diseñador de vestuario, cartelista, grabador, pintor, ilustrador de libros, profesor y escritor. Ha realizado numerosos portafolios gráficos. En 1968 estableció el Taller Alacrán, taller-escuela de arte comprometido con la denuncia de la realidad social y política nacional, el cual dirigió hasta 1971. En 1974 fue uno de los artistas premiados en la III Bienal de San Juan del Grabado Latinoamericano. Dos años después, cuando supuestamente se celebraría la IV Bienal, renunció al jurado por estar en desacuerdo con la utilización de fondos del bicentenario de la independencia de los Estados Unidos en la organización del evento. Las múltiples protestas causaron que la IV Bienal se cancelara en 1976. No fue sino hasta 1979 cuando al fin se reanudó. Martorell fue el artista puertorriqueño homenajeado con una exposición retrospectiva con motivo de la VII Bienal llevada a cabo en 1986. Un año antes, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) allanó su residencia como parte de un operativo para detener a presuntos miembros de Los Macheteros (grupo clandestino revolucionario que apoya la independencia de Puerto Rico).
La revista Plástica, en cuyas páginas se publicó este artículo, fue una de las publicaciones especializadas editada con cierta continuidad en Puerto Rico. Desde sus modestos comienzos como boletín de la Liga de arte de San Juan en 1968, a partir de 1978 la revista cambió su nombre a Plástica revista de la Liga de estudiantes de San Juan. A pesar de la especificidad de su nombre, en los 21 números editados se tocaron gran variedad de temas tanto sobre el arte puertorriqueño como el latinoamericano. La revista editó ejemplares antológicos dedicados a temas tales como la V Bienal de San Juan del grabado latinoamericano y del Caribe (1981), la arquitectura puertorriqueña y la plástica latinoamericana. Su primera junta editorial la compuso Hélène Saldaña, Delta Picó, Cordelia Buitrago y J.M. García Segovia. Además de numerosos ensayos escritos por los principales pensadores puertorriqueños, sus páginas contaron con la participación de algunos de los más destacados artistas y críticos del arte latinoamericano: Luis Camnitzer, Damián Bayón, Jacqueline Barnitz, Samuel Cherson, Joseph Alsop, Omar Rayo y Ricardo Pau Llosa, entre muchos otros.