Roberto Reyes Pérez había participado del primer impulso mural como ayudante de David Alfaro Siqueiros (1896-1974). Al parecer, en ese momento de la publicación, se colocaba en la trinchera opuesta pues compartía el espacio editorial con Diego Rivera (1886-1957) cuya afinidad al trotskismo era una posición política que Siqueiros combatía con la misma furia que al enemigo principal: la burguesía.
Choque fue junto con Juan Brochas, el órgano de difusión de la Alianza de Trabajadores de Artes (ATA), la también llamada Alianza de Trabajadores de Artes Plásticas (ATAP). Dicha alianza surgió para defender sus intereses económicos frente al Departamento de Bellas Artes. Los pintores integrantes de la ATA, Juan Manuel Anaya, Raúl Anguiano, Santos Balmori, Jesús Guerrero Galván, Máximo Pacheco, Roberto Reyes Pérez, Víctor M. Reyes, Rafael Valderrama y Jorge Olvera, hicieron un llamamiento a los artistas a organizarse sindicalmente, a causa de los despidos injustificados de profesores de artes plásticas, música y teatro.
En consonancia con su título, Choque buscaba confrontarse, estrellarse, establecer polémica con lo establecido; por un lado, buscando así alinearse con la vanguardia obrera, por el otro, centrado en la lucha clasista dentro de la producción artística.