Jorge Gumier Maier es una de las figuras insoslayables dentro del panorama del arte argentino de los años noventa. Artista y crítico de arte, dirigió la Galería del Centro Cultural Ricardo Rojas (Buenos Aires) desde su creación en el año 1989 hasta 1997.
Espacio marginal por entonces dentro del campo artístico de Buenos Aires, comenzó a adquirir una importante visibilidad entre 1991 y 1992. Los “jóvenes” artistas de “el Rojas” (Fabián Burgos, Graciela Hasper, Feliciano Centurión, Martín Di Girolamo, Alberto Goldestein, Sebastián Gordín, Miguel Harte, Agustín Inchausti, Luis Lindner, Nuna Magiante, Emiliano Miliyo, Esteban Pagés, Ariadna Pastorini, Marcelo Pombo, Cristina Schiavi, Enrique Marmora, Sergio Vila, Benito Laren, Omar Schiliro y Alfredo Londaibere, Liliana Mareca, entre muchos otros) empezaron a ser incorporados en la agenda de espacios clave de exhibición. Contándose, entre ellos, el ICI (Instituto de Cooperación Iberoamericana), el Centro Cultural de España o bien la Galería Ruth Benzacar.
La referencia a poéticas del pasado, como el pop, el minimalismo, el arte concreto (bajo reformulaciones personalísimas), además de elementos del kitsch, han servido para caracterizar los recursos expresivos de tales artistas. Hacia fines de la década, los artistas que integraron “el grupo del Rojas”, fueron comprendidos, de manera general, como los representantes del “arte argentino de los noventa”.
Fabián Lebenglik, critico de arte, fue uno de los protagonistas del arte argentino de los noventa desde sus escritos en la sección de artes visuales aparecidos en el diario Página/12 (Buenos Aires).