Esta carta fue incluida en el catálogo de la retrospectiva de cuarenta años de grabado de Nemesio Antúnez expuesta en Galería Praxis (6 junio al 8 julio, 1989) en la capital chilena. Trátase de un relato personal y emotivo de Nemesio a su hijo Pablo, el cual nos permite recorrer, a través de su experiencia, la historia reciente de esa disciplina gráfica en Chile, además de su rol fundamental en la aparición del grabado contemporáneo en el país, pasando de arte menor a la configuración de una escena viva [Consultar al respecto en el Archivo Digital ICAA “De como empezó la enseñanza de Antúnez” de Roser Bru (doc. no. 774610)]. Con fines similares para la retrospectiva de sus 50 años, existe una carta anterior (también dirigida a Pablo aunque dedicada a la pintura) publicada por Galería Praxis como “Carta aérea” (1988), primera publicación sobre la vida y obra del grabador.
Nemesio Antúnez (1918-93) fue un destacado artista visual chileno, activador de espacios y redes culturales tanto a nivel nacional como internacional cuyo objetivo fue difundir, acercar y democratizar el arte. Antúnez desarrolló, de modo paralelo a su obra y docencia, las tareas diplomáticas como Agregado Cultural en la Ciudad de Nueva York (1964-69); dirigió el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile (1961-64) donde organizó la primera de las cuatro Bienales Americanas de Grabado. Respecto al Museo Nacional de Bellas Artes, al que buscó transformar en un museo vivo y abierto durante dos importantes gestiones, durante la Unidad Popular (1969-73) y tras la vuelta de la democracia (1990-93). Fuera de las instituciones, Antúnez creó iniciativas tales como el programa radiofónico Arte desde Nueva York así como el programa televisivo Ojo con el arte.