Desde sus inicios, el Centro de Arte y Comunicación (CAYC) liderado por el gestor, artista y empresario Jorge Glusberg se propuso como un espacio interdisciplinario que pudiera generar un movimiento de arte experimental. Para ello, la conformación de redes de colaboración entre artistas y críticos locales e internacionales fue fundamental. Las exposiciones hicieron visibles esos intercambios, en los que la presentación de panoramas de tendencias o artistas individuales era una oportunidad para conocer las novedades del arte contemporáneo internacional.
Si bien la participación de artistas brasileños había sido escasa en los primeros años del Centro, la voluntad de consolidar un arte regional para América Latina hacia 1971 se vuelve uno de sus objetivos principales. Para Glusberg, tal unión no estaba basada en aspectos formales sino en “problemáticas en común”. La expansión de “un territorio dialógico transnacional” se dio a través de la crítica brasileña, curadora e historiadora del arte Aracy Amaral (n. 1930) y de Walter Zanini (1925-2013), crítico, gestor y director del MAC-USP (Museu de Arte Contemporânea da Universidade de São Paulo), con los cuales el CAYC organizó diferentes iniciativas tales como el intercambio de artistas de la región e internacionales, exposiciones y coloquios. [Luiza Mader Paladino, Caiana, 2016].
Vera Chaves Barcellos (n. 1938), artista y educadora brasileña. Desde la década de setenta participó activamente en la escena cultural de su ciudad (Porto Alegre, Rio Grande do Sul), siendo una de las fundadoras del Grupo Nervo Óptico (1976–78) —junto con Carlos Asp, Carlos Pasquetti, Clóvis Dariano, Mara Alvares y Telmo Lanes—, así como de Espaço NO. (1979-82). A lo largo de su producción artística hace indagaciones sobre el nexo somático tanto con la naturaleza como con el tiempo; el uso del cuerpo lo transfiere al grabado, el video, la fotografía, y la instalación. A partir de 1975, la fotografía se convirtió en el medio central para la artista; además, la reproducción y sus variantes se volvió herramienta importante para su cuestionamiento de la índole de las imágenes.
Esta gacetilla reproduce parte de la obra Testarte (1976), consistente en un conjunto de fotografías y textos. Fueron escritos por la artista y el público participante, invitado a dar un testimonio sobre lo que veía por tras de las imágenes. La integración pública en la obra servía para mostrar procesos de recepción de las mismas. Esta obra fue presentada en la XXXVII Biennale di Venezia (1976) así como en la XIV Bienal de São Paulo (1977); en el caso paulistano, participa en la sección “Arte No Catalogado” donde también se incluyó el Grupo de los Trece.