Desde sus inicios, el Centro de Arte y Comunicación (CAYC) liderado por el gestor, artista y empresario Jorge Glusberg se propuso como un espacio interdisciplinario que pudiera generar un movimiento de arte experimental. Para ello, la conformación de redes de colaboración entre artistas y críticos locales e internacionales fue fundamental. Las exposiciones hicieron visibles esos intercambios, en los que la presentación de panoramas de tendencias o artistas individuales era una oportunidad para conocer las novedades del arte contemporáneo internacional; o bien de dar a conocer artistas argentinos y latinoamericanos en la escena mundial.
Como muchos de sus contemporáneos, el artista californiano John Baldessari (1931–2020) comenzó su práctica artística en el campo de la pintura. Desde mediados de los años sesenta fue incorporando textos y fotografías en sus trabajos, donde puede notarse la influencia tanto del cine como de la publicidad. Incluso, su interés por el lenguaje se pone en evidencia al indagar sobre las reglas del juego y el azar que operan en cada obra. En 1970, quema todas sus pinturas realizadas entre 1953 y 1966, las cuales, años después, formarían parte de una nueva obra: The Cremation Project.
Siendo parte de la difusión de la exposición inaugurada en agosto de 1974 en el CAYC, la gacetilla se ilustra con una de las páginas de Ingres y otras parábolas (1971); un libro de artista editado originalmente por la galería Konrad Fischer de Düsseldorf y parte de la publicación organizada por Germano Celant, Book as Artwork 1960 / 1972. [Consultar GT-450 (doc. no. 1476545)].
Baldessari reúne en el libro (con formato calendario) fotografías y textos del mundo del arte en el cual alterna inglés, alemán, italiano y francés, proponiendo así un juego entre ambos registros. Ingres y otras parábolas consta de diez paneles; cada uno presenta una fotografía en blanco y negro con una historia breve. Las fotografías enfocan, indistintamente, objetos diversos: un clavo, un avión, la oreja de un hombre y/o las pirámides de Giza en Egipto. Por otra parte, los textos incluidos son relatos sobre el arte en sí. En los nexos que establece entre imagen y texto ninguna de ellas tiene prioridad: nada refleja ni ilustra lo otro, sino que, al azar, se enriquecen mutuamente.