Desde sus inicios, el Centro de Arte y Comunicación (CAYC) liderado por el gestor, artista y empresario Jorge Glusberg se propuso como un espacio interdisciplinario que pudiera generar un movimiento de arte experimental. Para ello, la conformación de redes de colaboración entre artistas y críticos locales e internacionales fue fundamental. Las exposiciones hicieron visibles esos intercambios, en los que la presentación de panoramas de tendencias o artistas individuales era una oportunidad para conocer las novedades del arte contemporáneo internacional; o bien de dar a conocer artistas argentinos y latinoamericanos en la escena mundial.
El año 1972 es un año clave en la consolidación del arte de sistemas como estrategia de promoción internacional del CAYC. Con la inauguración en mayo de dicha muestra en la III Bienal de Arte Coltejer, en Medellín (Colombia), comienza una intensa itinerancia por distintas ciudades latinoamericanas y europeas. [En referencia a eventos anteriores a este, consultar las gacetillas sobre el realizado en la plaza Rubén Darío: GT- 8, Escultura, follaje y ruidos (doc. no. 747623), y GT-166, Arte e Ideología en CAYC al aire libre (doc. no. pendiente)]. Esta gacetilla anuncia la apertura de la exposición CAYC al aire libre. Arte e Ideología en el marco de Arte de Sistemas II.
La exhibición Arte de Sistemas II (Buenos Aires, setiembre de 1972) se desarrolló en tres sedes: Arte de Sistemas Internacional (Museo de Arte Moderno de Buenos Aires), Arte de Sistemas Argentina (Centro de Arte y Comunicación) y CAYC al Aire Libre. Arte e Ideología (Plaza Roberto Arlt), así como un ciclo de música experimental. Con la complejidad que suponen tres exposiciones, se aumentó el número de tendencias presentes, destacándose el predominio de un arte gestual, participativo, efímero, de estricto presente y de marcado carácter político.
En esta gacetilla se difunde un documento poco frecuente para la época; trátase del plano de la exposición en la plaza, donde figuran el nombre y la ubicación de los artistas participantes. Cabe destacar que, por ser una intervención espontánea, no figura en el texto la obra colectiva La realidad subterránea; lo mismo sucede con el enorme globo inflable, presente en el espacio aéreo de la plaza y presentado por Juan Carlos Romero con estas palabras en lunfardo: “Forfai/Canguela/Falante/Metedor/Garaba/Bronca” (significando “sin dinero”, “miseria”, “hambre”, “el que mete o entra”, “amante”, “pelea”).
Inaugurada el 23 de septiembre de 1972, el conjunto de obras resonaba con situaciones de aquel contexto sociopolítico. La convulsionada realidad argentina y latinoamericana bajo dictaduras militares y civiles, así como la posibilidad de un arte para el cambio social se debatían en el espacio público. A resultas de ello, dos días después de su apertura, la muestra fue clausurada siendo las obras confiscadas tras la intervención policial. La incursión del arte en la calle desafiaba así los límites represivos del autoritarismo instalado en 1966 con el Golpe del General Onganía.