El texto de la curadora venezolana Federica Palomero (n. 1954) aporta una visión panorámica de la conformación de la colección de arte latinoamericano del Museo de Bellas Artes (Caracas, 1988): sus inicios, momentos de enriquecimiento y reorientación del perfil de la colección tras la creación de la GAN (Galería de Arte Nacional) en Caracas (1976). Palomero propone una lectura histórica de la evolución de la colección, ajustada al perfil caraqueño del MBA (Museo de Bellas Artes); para ello, se remonta al Museo Nacional creado por Antonio Guzmán Blanco en 1874, también en la capital venezolana. Palomero señala que pocos años después fue clausurado en 1887, aunque funcionó, por lo menos, hasta 1916. El documento de Palomero muestra la evolución estructural de una colección que primero fue de Arte Interamericano, para luego separar el arte latinoamericano del norteamericano, en dos colecciones. Esto habla también de cambios a lo largo del siglo XX en la concepción del arte de la región. Demuestra los avances del MBA (Caracas) en lo que al estudio del arte latinoamericano se refiere después de 1958, no sólo en cuanto al enriquecimiento de la colección, sino también a la investigación del mismo, especialmente durante la existencia del CIDAPAL (Centro de Investigación de las Artes Plásticas de América Latina), creado en 1978 y desaparecido poco tiempo después. Añade a esto, los aportes de agrupaciones como la Sociedad de Amigos, y la importancia de las gestiones de antiguos directores del museo como Armando Barrios, Miguel Arroyo, Marco Miliani y Oswaldo Trejo, en lo que al estudio del arte latinoamericano se refiere.