El texto de Federica Palomero, la curadora venezolana, acerca de la muestra Antes del paisaje de Octavio Russo (n. 1949), ofrece referencias pertinentes para confrontar el trabajo de este artista venezolano: la geografía, la naturaleza, los animales, las plantas, y el hombre inserto en el paisaje que configuran estos elementos. La investigación de Russo para esta exposición, llevada a cabo en el puerto de Parmana (estado Guárico, Venezuela) involucró dibujo, pintura, fotografía, collage e instalaciones, en un intento por aprehender el paisaje (o fragmentos de él) como un todo inabarcable que envuelve a sus habitantes. Palomero permite aproximarse a esta idea fraccionaria desde la descripción geográfica, otorgándole especial importancia a los detalles de esta zona de los llanos venezolanos (desde el clima hasta la fauna) para establecer un anclaje seguro del trabajo de Russo en la realidad. Lo hace, aunque con la absoluta claridad de que el problema esencial no es representativo. Russo formó parte de los artistas que protagonizaron el boom del dibujo en la Venezuela de los años setenta y se caracterizó por una obra de innegable corte expresionista; sus primeros trabajos figurativos dieron paso a investigaciones plásticas en las que las referencias a la realidad fueron siendo eliminadas paulatinamente. Es así como el texto de Palomero subraya un momento de madurez en este proceso, el cual se desarrolló a lo largo de la década de los noventa y se prolongó hasta 2003.