El ensayo “Reverón y el arte moderno” del crítico y curador venezolano Luis Enrique Pérez-Oramas (n. 1960) es uno de los textos más audaces escritos sobre el gran maestro venezolano Armando Reverón (1889–1954) publicado en la segunda mitad del siglo XX. Aparece por vez primera en el catálogo de la exposición Armando Reverón realizada en el Palacio de Velázquez del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, en Madrid (1992).
Después de los estudios fundamentales producidos por intelectuales de la talla de Alfredo Boulton y Juan Calzadilla, con textos aparecidos en las décadas de los cincuenta y de los setenta (respectivamente), la crítica en torno a la obra reveroniana se revitaliza y surgen nuevas perspectivas de análisis, a partir de la publicación de los primeros textos de Pérez-Oramas: Armando Reverón: de los prodigios de la luz a los trabajos del arte (Caracas: Museo de Arte Contemporáneo, 1989) y el presente ensayo, en 1992. Desde entonces hasta la fecha, el autor ha producido el cuerpo de ensayos más cuantioso y relevante sobre el pintor durante los últimos años (siendo el más reciente “Reverón y el arte moderno en América Latina”. Versión en español (Caracas: MoMA/PAR, 2007).
En “Reverón y el arte moderno” (1992) se exponen las tesis básicas de Pérez-Oramas al respecto. Analiza la vida y obra del artista apoyándose tanto en la historia universal como en la de Venezuela. Con herramientas de la estética, estudios de la imagen y de sus posibles analogías, el crítico desmitifica el (supuestamente) enigmático problema de la modernidad como privilegio de un lugar o un momento irrecuperables, acercándose, así, de manera amplia a la obra del pintor. Son fundamentales en este ensayo sus análisis de obras emblemáticas de Reverón: entre ellas, Cinco figuras, las series de paisajes sobre el tema del Playón y La maja criolla, obra que, a su juicio, puede verse como “triple emblema de la modernidad”; en otras palabras, como pintura que, “representándose a sí misma como escena, como objeto y como Arcadia, puede franjearse una brecha más allá de las amenazas de la desaparición de la representación”.
El catálogo que acompañó a la muestra de Madrid de 1992, en que se publica este ensayo, contó con otros dos escritos inéditos importantes: del crítico español Juan Manuel Bonet (“Reverón en su luz”) y del pintor español Antonio Saura (“El deslumbramiento”).