Juan Acha comenta la exposición del grupo Arte Nuevo en el MALI (Museo de Arte de Lima) en noviembre de 1966, afirmando que lo primero que se percibe al visitar la muestra es “la presencia de un espíritu renovador”; pero no en el sentido de los “términos internacionales”, sino en el “de la renovación de nuestro ámbito artístico local”. A su juicio, el colectivo formula “problemas estético-visuales concisos y elementales” que contradicen el “endémico romanticismo, tan adicto a la expresión lírica de carácter intuicionista y autobiográfico”, imperante en el medio peruano. Debido a la diversificación y actualización de sus propuestas (pinturas, esculturas y objetos Op y Pop, el autor celebra su irrupción y el apoyo recibido por las entidades organizadoras.

El crítico peruano radicado en México Juan Acha (1916–95) fue uno de los principales propulsores de la vanguardia artística en el Perú a mediados de la década de los sesenta. A través de sus escritos, ensayos y notas periodísticas, el Pop y el Op-Art encontraron tanto un defensor teórico como un promotor de los jóvenes que cultivaban esas tendencias enmarcadas por la ideología desarrollista del momento.

Debido al interés causado (en octubre de 1966) por la primera exposición del Grupo Arte Nuevo —uno de los colectivos iniciales de la vanguardia en el Perú–—, la muestra se trasladó a las salas del prestigioso MALI (Museo de Arte de Lima). Al presentarse en ese marco institucionalizado, los integrantes de Arte Nuevo aprovecharon para publicar este documento programático dentro del catálogo de la exposición. 

Tras haber sido integrantes del Grupo Señal, formaron el colectivo Arte Nuevo: Luis Arias Vera (1932–2016), Gloria Gómez-Sánchez (1921–2007), Teresa Burga (n. 1935), Jaime Dávila (n. 1937), Víctor Delfín (n. 1927), Emilio Hernández Saavedra (n. 1940), José Tang (1941–2006), Armando Varela (n. 1933) y Luis Zevallos Hetzel (n. 1933). Inicialmente, montaron sus obras en una abandonada tienda de avisos luminosos ubicada en el centro histórico de Lima —a escasos metros de la Plaza Mayor y el Palacio de Gobierno—, transformándola en la improvisada galería El ombligo de Adán. Esta muestra, con un despliegue mayor de Pop Art, Op y de “ambientaciones”, fue clave para las nuevas tendencias artísticas por desarrollarse en el Perú, sobre todo, en su enfrentamiento con el llamado arte “tradicional”.

[Respecto al Grupo Arte Nuevo, consúltense en el archivo digital ICAA los siguientes textos: de Luis Freire “De cómo el Gral. Velasco reventó el ‘¡Pop! Art’” (doc. no. 1139323); (sin autor) “Exagerado sentido realista: Exposición de Luis Arias Vera” (doc. no. 1142510); de Mario Belaúnde Guinassi (con el pseudónimo de “Juan Gris”) “La nueva imagen del IAC” (doc. no. 1142594) y “La pintura se fue a la feria: happening vs ‘bienal’” (doc. no. 1142737); de Felipe Buendía “Mala noche de Buendía” (doc. no. 1142628) y “Resentido social” (doc. no. 1142644); del Grupo Arte Nuevo (sin título) [“Nos encontramos en un mundo determinado...”] (doc. no. 1142834); (sin autor) “Op-Pop-Sex” (doc. no. 1142804); y (sin autor) “Treinta minutos de charla con la señora Gloria Benvenuto de Gómez Sánchez, nuevo valor de la Pintura Nacional” (doc. no. 1142413)].