Luis Augusto Cuervo (1893–1954), alcalde de Bogotá en 1929, bibliófilo e historiador de la Academia Colombiana de Historia, escribió para el Boletín de Historia y Antigüedades (julio de 1949) una de las primeras semblanzas biográficas sobre el pintor colombiano Jesús María Zamora (1871-1948). Aunque desde la muerte del artista habían sido publicados algunos opúsculos necrológicos laudatorios (por ejemplo, el artículo “Falleció esta mañana el maestro Zamora”, publicado en El Espectador, Bogotá: 17 de julio de 1948), lo cierto es que el texto de Cuervo es, aunque breve, el primer intento de ubicar al pintor. Cuervo lo hace con una visión de largo aliento, abarcando el panorama artístico colombiano de finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.
El estudio del texto de Cuervo, fuente de algunos trabajos posteriores —por ejemplo, de Fajardo de Rueda, Marta, Jesús María Zamora: discípulo de la naturaleza (Bogotá: Fondo Cultural Cafetero, 2003)—, permite, a través de sus descripciones textuales, ubicar el paradero histórico de algunas obras de Zamora e identificar algunas de sus pinturas hasta hoy desconocidas.
Algunas publicaciones periódicas anteriores al opúsculo de Cuervo son: (i) Bayona Posada, Nicolás. “Nuestros artistas: Jesús María Zamora”, Revista Letras: Órgano de la Sociedad Arboleda, No. 32, Bogotá (marzo de 1914); (ii) Buenahora, Luis, “El paisajista J.M. Zamora”, en Lecturas Dominicales de El Tiempo, Bogotá (23 de mayo de 1923); (iii) El Caballero Duende [Eduardo Castillo], “Una entrevista con el pintor Zamora”, Lecturas Dominicales de El Tiempo No. 191, Bogotá (20 de marzo de 1927); (iv) Miró, Paco. “El paisajista Jesús M. Zamora”, Lecturas Dominicales de El Tiempo, Bogotá (23 de septiembre de 1923).