Con su trabajo artístico Juan Camilo Uribe encontró una manera de aprovechar el lenguaje del pop para plantear una reflexión sobre la cultura popular colombiana, en la que reivindicó lo local. En esta entrevista, Uribe comenta distintos aspectos característicos de su trabajo, tales como el humor, que considera fundamental y de carácter “accidental”; y su método de trabajo, que parte de anotaciones conceptuales que luego desarrollaba mediante estampas populares. Asegura no considerarse irreverente; si bien su trabajo, inevitablemente, resultó serlo así en su momento. Asegura, “Mis láminas demuestran el fin de una era religiosa ante otras verdades que se imponen día a día por la ciencia (…) Para nosotros, el Corazón de Jesús es más importante que el átomo. Esa contradicción que pertenece a la realidad es la que intento que la gente vea”.

Esta es una valiosa entrevista realizada a Juan Camilo Uribe (1945-2005), realizada al calor de los acontecimientos, en un momento en que su obra despertaba reacciones encontradas en el medio artístico colombiano. 

Uribe abandonó el colegio antes de terminar el bachillerato y se formó como artista de manera autodidacta. Empezó a obtener reconocimiento local como ceramista, a partir de 1968; técnica que dijo haber abandonado porque se acercó a la escultura y no contaba con materiales apropiados para desarrollarla. En 1972, Uribe obtuvo mención en la III Bienal de Arte de Coltejer (Medellín) con un trabajo realizado conjuntamente con Marta Elena Vélez. Su trabajo se distinguió por retomar imágenes populares vinculadas a prácticas religiosas; las cuales, frente a la cultura visual hegemónica, aparecían como cursis. Con ellas creó obras con implicaciones desmitificadoras, críticas y humorísticas que hacen alusiones soterradas a la realidad nacional.

La entrevista, reseñada, fue realizada por el artista, curador y administrador cultural, Félix Ángel (n. 1949), quien en su libro Nostros. Un trabajo sobre los artistas antioqueños (1976), y en Nosotros, Vosotros, Ellos. Memoria del arte en Medellín Memoria del arte en Medellín en los años 70 (2008) documentó, mediante entrevistas con los protagonistas, la transición artística que vivió Medellín, la capital antiqueña, en la década de setenta. Era el surgimiento de artistas jóvenes opuestos a la academia local y empeñados en encontrar modos de expresión contemporáneos vinculados a las vanguardias internacionales.