En el presente documento se deja entrever el camino especial y mítico seguido por la artista Anna Barros anticipando así el vislumbre tras el interés de ella por la luz y la tecnología. La muestra Fogo-facto [Fuego-hecho, una aliteración de fuego fatuo], de Anna Barros, se llevó a cabo en 1990, en los espacios del MAM-SP (Museu de Arte Moderna de São Paulo).
Además de artista, Anna Barros es profesora universitaria, obteniendo un pos-doctorado en Comunicação e Semiótica vinculado a la PUC-SP (Pontifícia Universidade Católica de São Paulo). Sus estudios se centran de manera preferencial en los “perception artists” de California cuyas obras penetran en la subjetividad del proceso visual humano y sus efectos sobre la práctica artística. La luz/luminosidad ha sido un fenómeno constante en sus indagaciones, siendo la principal inspiración y material creativo para sus instalaciones y animaciones computarizadas desde 1990.
Agnaldo Farias es curador independiente y profesor de la FAU-USP (Faculdade de Arquitetura e Urbanismo da Universidade de São Paulo). Sus primeras publicaciones de crítica de arte datan de los ochenta, convirtiéndose, con el paso del tiempo, en un interlocutor medular para el arte actual brasileño. En los noventa fue curador del MAM-Río, llegando a ser el responsable de la curaduría de la representación brasileña durante la 25ª Bienal de São Paulo y, posteriormente, curador general de la exposición Bienal 50 anos (2001). Es autor de diversos libros como The Piano Factory (sobre la obra del pintor Daniel Senise); Arte Brasileira Hoje (2002); y la monografía de Amelia Toledo: as naturezas do artifício (2004). Son de destacarse sus exposiciones montadas en torno a la obra de uno de los integrantes del Grupo Rex, Nelson Leirner.