La obra de Caetano de Almeida (n. 1964) surge en los años ochenta, en el contexto conocido como “regreso a la pintura”, intrínseco de la llamada Geração 80, aunque siguiendo una trayectoria de cariz alternativo. Los trabajos de Almeida se apropian del universo reiterativo de la citación, de la parodia, del kitsch y del cuestionamiento que oscila entre los lindes de la copia y el original.
Crítico de arte, curador, investigador y profesor, Tadeu Chiarelli descolla en el ámbito del arte brasileño en la década de los ochenta. Posteriormente, fue tanto curador como director técnico del MAM (Museu de Arte Moderna) de São Paulo en las dos últimas décadas, siendo responsable de un buen número de exposiciones; entre ellas y en destaque, las versiones 1997 y 1998 de Panorama da Arte Brasileira. Fue director del MAC-USP (Museu de Arte Contemporânea da Universidade de São Paulo), director artístico de la Pinacoteca do Estado de São Paulo, y desde junio de 2015 director general de la misma.
Otros críticos de arte y artistas brasileños contribuyeron a la interpretación del problemático “retour à l’ordre” pictórico que sacude a la llamada Geração 80; entre ellos, Jorge Guinle Filho en su artículo “Papai era surfista profissional, mamãe fazia mapa astral legal. ‘Geração 80’ ou como matei uma aula de arte num shopping center”, publicado en la revista Módulo (Río de Janeiro, julio de 1984); de Roberto Pontual, Explode Geração (Río de Janeiro: Avenir, 1984); Marcus de Lontra Costa escribe “A festa acabou? A festa continua”, también en la revista Módulo (Río de Janeiro, mayo-junio de 1988); y Ricardo Basbaum publica “Pintura dos anos 80: algumas observações críticas” en la revista Gávea (Río de Janeiro, 1988) [doc. no. 1110972].