Las pinturas de Antonio Henrique Amaral son presentadas en este texto por Olívio Tavares de Araújo, quien pone en tela de juicio los términos “realismo” y/o “hiperrealismo” empleados para describir su obra. En su opinión, los trabajos se encuentran más próximos de “lo fantástico” y de “lo transcendental”, llamando la atención del lector sobre su finalidad esencialmente plástica. Más que figuras de plátanos, el artista trae a la propia tela sus elementos constituyentes, del mismo modo que su lenguaje alude a la historia del modernismo. Araújo describe su evolución pictórica desde la Iª Bienal Latino Americana, en 1978, así como la producción gráfica (con dibujos ya sea literales, gestuales o nerviosos), la cual le recuerda a Jackson Pollock. Finalmente, se da énfasis a la osadía del artista como inventor y como aventurero.

El texto del crítico viene a ampliar la lectura en torno a la obra de Antonio Henrique Amaral llamando la atención hacia los aspectos específicamente de índole plástica en su producción. La exposición mencionada de su obra se llevó a cabo en la galería de arte Grifo (São Paulo) del 6 al 23 de octubre de 1981, año de su regreso al Brasil tras un largo exilio voluntario en la ciudad de Nueva York y debido al período álgido de la dictadura militar brasileña (1964−85).

Antonio Henrique Amaral (1935?2015) además de pintor, grabador y dibujante, es hermano menor de la renombrada crítica de arte Aracy Amaral. Su trayectoria artística dio inicio en la década de los cincuenta en el área de grabado, imprimiendo imágenes de índole fantástica, posteriormente sobrepuestas con elementos de la gráfica popular y de la cultura masiva. El artista hace viajes innumerables por América Latina hasta residir por larga temporada en los Estados Unidos. Desde finales de los sesenta (momento determinante de su obra) elabora un lenguaje figurativo que lo aproxima de la propia imagen fotográfica, formulando con ello metáforas de la condición social brasileña y sobre todo de las condiciones asfixiantes de la política bajo régimen militar. La década de los setenta la vive plenamente desde Nueva York.

Para más información sobre el artista, hay una transcripción de “Depoimento gravado especialmente para o acervo da Galeria de Arte Alberto Bonfiglioli em 26.02.75” en torno a la experiencia del exilio de Amaral [véase doc. no. 1111039], y un documento epistolar dirigido al filósofo checo “[Letter] 1974 October 12, New York [to] Vilém Flusser” [doc. no. 1111047].

Olívio Tavares de Araújo es periodista y crítico de arte. Durante los años sesenta, tuvo a su cargo la columna de arte en el diario Estado de Minas y, en la década siguiente, lo hizo en la Veja de gran circulación nacional. Publicó algunos libros, realizando además algunas películas y organizando exposiciones sobre artistas brasileños.