El texto del crítico de arte Ibiapaba Martins es uno de los raros documentos que informa sobre el Grupo Quinze, una asociación que aglutinó pintores de origen nipo-brasileño, entre 1947 y 1948, en São Paulo. Tanto en esta ciudad como en Río de Janeiro, en las décadas de los treinta y cuarenta, la escasez de escuelas de arte provoca la formación de agrupaciones artísticas donde se pudiera debatir la obra de los jóvenes artistas, intercambiando informaciones y compartiendo los gastos del taller. Lo mismo sucedió con otras asociaciones como la del Grupo Santa Helena, Núcleo Bernardelli y la Seibi. La producción pictórica de los miembros del Grupo Quinze tuvo como parámetros históricos el posimpresionismo, volcándose, prioritariamente, al paisaje suburbano y temas intimistas como las naturalezas muertas. El Grupo Quinze fue conocido también como Grupo do Jacaré [Grupo del Caimán], reuniendo a participantes de los núcleos Seibi, Santa Helena, Bernardelli y Guanabara (en su mayoría de origen japonés) y brasileños como Geraldo de Barros, quien, en la década siguiente, adhiere la tendencia constructiva vía el grupo ruptura (1952). Además de suministrar datos sobre la formación del Grupo Quinze, el documento revela un atisbo sobre las características predominantes en sus obras.
[Como lectura complementaria, véanse en el archivo digital ICAA los siguientes textos: “Grupo Seibi” (doc. no. 1110646); de Tomoo Handa “1ª Ata Grupo Seibi” (doc. no. 1110650) y con Maria Cecília França Lourenço “Depoimento: Tomoo Handa” (doc. no. 1110643); de Alzira Pecorari et al. “Depoimentos sobre o Grupo Guanabara” (doc. no. 1110644); y el testimonio dado a Daisy Peccininni “Depoimento de Yoshyia Takaoka ao Centro de Pesquisa de Arte Brasileira Fundação Armando Álvares Penteado” (doc. no. 1110642)].