En su testimonio, el artista Abelardo da Hora (1924–2014) mezcla lo autobiográfico con episodios referentes a la fundación de la SAM (Sociedade de Arte Moderna) en Recife, así como del taller Atelier Coletivo y del Movimento de Cultura Popular (todas ellas en el estado de Pernambuco, décadas de los cincuenta y sesenta). Describe su anhelo de “democratizar” la enseñanza de arte en esa región noreste del Brasil, formándose un amplio movimiento cultural de expresión brasileña vía SAM (1948), contrariando así el impulso modernista que “quedó entre la élite”. Cuatro años después (1952) Abelardo da Hora funda el Atelier Coletivo, taller a su cargo donde da clases al alimón con otros artistas y arquitectos como Gilvan Samico, Wilton de Souza, Wellington Virgolino, Ionaldo e Ivan Carneiro. Narra excursiones del grupo por el interior del estado, procurando promover la producción cultural de “gente simple” de esa región noreste del Brasil. Como un desdoblamiento de las actividades del Atelier operó el Movimento de Cultura Popular. Años después, tras el golpe militar (1964?85), inspiró la creación combativa del CPC (Centro Popular de Cultura) vinculado a la UNE (União Nacional dos Estudantes), regándose por el territorio brasileño (estados de Bahía, São Paulo, Río de Janeiro, Minas Gerais y Rio Grande do Norte) con el objetivo político de promover la producción e investigación de la cultura popular.