El artículo “El patrimonio fotográfico en Colombia: estado de la cuestión” derivó de una conferencia presentada por Patricia Londoño en el Encuentro Colombiano de Fotografía realizado en Rionegro (1987). El texto fue publicado en la revista Estudios Sociales de la Fundación Antioqueña para los Estudios Sociales (FAES) con el objetivo de difundir los resultados de las investigaciones en el campo fotográfico. En aquel momento, Londoño formaba parte del proyecto Memoria Visual del Banco de la República que buscaba la recuperación del patrimonio fotográfico del país; de hecho, Memoria Visual sintetiza el valor y el significado que durante los últimos 25 años se le ha otorgado a la fotografía en Colombia. En los archivos fotográficos descritos por Londoño, las fotografías son difundidas como representaciones exactas del mundo del pasado.
El estilo de recolección, clasificación y exhibición de las fotografías, sustentado en una forma particular de hacer la “historia de la fotografía”, incluía el ejercicio profesional de historiadores locales y nacionales que se encargaban del proceso de selección de las imágenes a partir de la creación de una serie de categorías que, por lo general, reproducían el contenido literal de las fotografías. No exploraban con rigurosidad las variables técnicas y estéticas. Los proyectos fotográficos estaban justificados por un texto escrito que incluía información (muy superficial) sobre los fotógrafos, el desarrollo local de la fotografía y la historia de la ciudad o población. Todas las fotografías fueron clasificadas, sin excepción, como patrimonio visual e histórico.
El auge de los archivos fotográficos y de la construcción y publicación de “historias locales de la fotografía” (con perspectivas de testimonio) ha estado presente en toda América Latina desde hace varias décadas. En Perú, por ejemplo, la experiencia de los talleres de fotografía social TAFOS es una referencia en el continente para los proyectos de acercamiento de la fotografía a la sociedad; en México la cuestión de los archivos fotográficos se ha convertido en un proyecto de interés nacional; y en Brasil la preocupación por el estudio de la fotografía llegó, desde hace muchos años, a las facultades de ciencias sociales y de artes. Este interés colectivo sobre la fotografía ha generado, además, un conjunto de reflexiones sobre el problema de la relación entre los documentos visuales y la realidad. Con ellas se busca cuestionar la funcionalidad testimonial de la fotografía como núcleo central de un modelo cultural con objetivos nacionalistas.