En este texto, Natalia Gutiérrez hace una crítica de la obra Corte en el ojo (2000) de Miguel Ángel Rojas. La desarrolla desde las nociones de “lugar” y “no lugar”; así como de la paradoja que establece entre ellas el antropólogo Marc Augé entendida como aquella posibilidad que tiene el hombre contemporáneo de ir desde la evasión del “no lugar” a la afirmación y la permanencia del “lugar”. Para Gutiérrez, Corte en el ojo torna evidente dicha paradoja, al mostrar cómo una sala de cine (es decir un “no lugar”) puede convertirse en un “lugar”; permitiendo, así, afirmar la identidad mediante encuentros sexuales que pueden ocurrir allí. Parafraseando al crítico André Bazin, al decir que “cuando la realidad no nos interesa, inventamos el enriquecimiento erótico de la vida y también le apostamos (1) a la ilusión del cine y del arte”, Gutiérrez llega a la conclusión de que, para Rojas, “la fotografía es ‘el lugar’ de reafirmación de identidad como sujeto y como artista” y el “no lugar” la experiencia misma.

Este texto sobre la obra Corte en el ojo (2000), de Miguel Ángel Rojas (nac. 1946), es substancial en la producción teórico-crítica de Natalia Gutiérrez (nac. 1954). Presenta una mirada producto de numerosos años de estudio sobre la obra de Rojas, enmarcándola en una publicación cuyo objetivo es la construcción de enfoques analíticos al arte contemporáneo colombiano. El texto es parte de la publicación Ciudad Espejo en la que Gutiérrez presenta entrevistas y ensayos sobre algunas obras escogidas de la versión número XXXIX del Salón Nacional de Artistas (2004).

Entre 1973 y 1979, el artista colombiano realizó numerosas fotografías tomadas a través de orificios encontrados en las puertas de los baños de varios teatros en la ciudad de Bogotá. El punto culminante de dicha obra fueron las series de fotografías tomadas en el teatro Faenza de la capital, en 1979, mismo año en que se exhibieron en Nueva York. Veinte años después, en el año 2000, Rojas regresa al lugar (teatro Faenza) accediendo a una petición de Gutiérrez, quien, tras numerosas entrevistas realizadas al artista, le propone llevar a cabo una grabación frente a dicho local. A su regreso, Rojas graba un recorrido por el interior del teatro.

La obra Corte en el ojo es un video cuya primera parte muestra las fotografías de la serie del teatro Faenza (realizadas en 1979), y la segunda parte, el recorrido captado por Rojas con la cámara de video en el mismo lugar, veinte años después. Es una obra importante porque abarca dos épocas de la producción de Rojas, convirtiéndose, así, en un pliegue que el artista realiza sobre su propia obra. Este texto se puede complementar con la entrevista a Miguel Ángel Rojas hecha por Natalia Gutiérrez y publicada, igualmente, en Ciudad Espejo [véase doc. no. 1099201].