Presentada en el Instituto de Estudos Brasileiros de la Faculdade de Letras de Coimbra (Portugal, 1952), la conferencia forma parte del libro Um brasileiro em terras portuguesas: Introdução a uma possível luso-tropicologia, publicado al año siguiente. El “nuevo concepto” propuesto por el sociólogo y escritor Gilberto Freyre (1900−87) establece su propia genealogía en los ensayos pioneros de Montaigne, y lo hace en nombre de una rehabilitación de los valores de los trópicos, sin considerarlos elementos provocadores de mera curiosidad. A su juicio, esto mismo, aplicado a las artes, sería acompañado del rescate tanto afectivo como sociológico. Aunque se torne difícil hablar de vínculos directos del luso-tropicalismo freyreano y el “movimiento tropicalista” que se desarrolla en Brasil en la segunda mitad de la década de los sesenta —tanto en la música (Caetano Veloso) como en las artes plásticas (Hélio Oiticica)—, ambos son un intento para revertir aquella negatividad que destila la interpretación de las regiones tropicales como únicamente tierras bárbaras.
Obviamente, el texto refleja el interés del escritor pernambucano en temas que hoy atisbamos con mayor precisión: los polos centro/periferia; las tensiones entre subdesarrollo y dependencia; los anhelos de traer a la mesa de discusión hegemónica la acumulación de experiencia regional; el atisbo de una renovación artística cimentada en valores “tropicales”, etcétera.