Frederico de Morais recalca en este texto la importancia —y de algún modo la impotencia— de una mayor unión entre los países latinoamericanos. Al comienzo del pasaje, declara que Brasil no podía continuar ignorando la relevancia de los demás países latinoamericanos y que, por otra parte, esos países tampoco podían continuar excluyendo a Brasil. Sólo mediante la colaboración podría resistir el arte latinoamericano a lo que denomina como las “multinacionales” del mercado del arte. Morais sostiene que el sistema formado por las instituciones de arte —a saber: museos, medios de comunicación, críticos y bienales— también constituye un instrumento de dominación, a su vez gobernado por naciones económicamente poderosas. Para el autor, el arte latinoamericano necesitaba comprender mejor el sistema de arte internacional para poder desafiar a las potencias hegemónicas y, a su juicio, este movimiento hacia una mayor unificación en contra de este dominio ya estaba sucediendo. Como ejemplo de ello cita la Bienal de São Paulo de 1977, en la que por primera vez se concedió el premio principal a un grupo argentino. Morais también menciona la creación de la Bienal de Arte Latinoamericano de São Paulo, en 1978 (de la que finalmente sólo hubo una edición).

Frederico de Morais (1936-) es un crítico brasileño de arte. El siguiente texto es la introducción al libro de Morais Artes plásticas na América Latina: do transe ao transitório, cuya primera edición data de 1979. La primera parte del libro es una colección de ensayos originalmente publicados en el periódico brasileño O Globo y por revistas especializadas de Brasil, México y Colombia. La segunda parte está compuesta por textos no publicados que el autor escribió durante sus visitas a diversos países latinoamericanos. A los últimos los compara con los “cuadernos de bocetos” que los artistas hacen durante sus viajes, puesto que mantienen cierta frescura y carga emotiva. Los textos son a veces poéticos, a diferencia de los escritos con mayor profundidad y posterior edición. En este pasaje, Morais todavía considera a la recientemente creada Bienal Latinoamericana de 1978 como una iniciativa positiva para lograr un mayor intercambio entre los países del continente, suceso que considera importante para el desarrollo de las artes nuestras. Sin embargo, en otro texto (“Apêndice: I Bienal Latino-Americana de São Paulo”), el autor critica el evento, pues declara que su tema de “mito e magia” constituía la prueba de la percepción estereotipada del arte latinoamericano. Su crítica de la deficiente organización del evento resultó premonitoria, pues el certamen sólo tuvo una edición. Ver, también, Frederico de Morais, "Apêndice: I Bienal Latino-Americana de São Paulo," Artes plásticas na América Latina: do transe ao transitório (Río de Janeiro: Civilização Brasileira, 1979), pp. 62-65.