Desde sus inicios, el Centro de Arte y Comunicación (CAYC) liderado por el gestor, artista y empresario Jorge Glusberg se propuso como un espacio interdisciplinario que pudiera generar un movimiento de arte experimental. Para ello, la conformación de redes de colaboración entre artistas y críticos locales e internacionales fue fundamental. Las exposiciones hicieron visibles esos intercambios, en los que la presentación de panoramas de tendencias o artistas individuales era una oportunidad para conocer las novedades del arte contemporáneo internacional, o bien de dar a conocer artistas argentinos y latinoamericanos en la escena mundial.
Durante los años setenta, el CAYC se tornó punto de referencia de las prácticas experimentales en Sudamérica. Algunas de ellas en conjunción con un gran meollo de experimentación y muestras no convencionales en Brasil —el MAC-USP, bajo la dirección del profesor Walter Zanini— compartiendo programas similares de estímulo a la producción y a la exhibición de propuestas de carácter conceptual, algunas consideradas como subversivas en el contexto sociopolítico marcado por la represión y censura dictatoriales. En 1976, el conceptualista realizó una gira por América del Sur (Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina) debida al apoyo suministrado por ambas instituciones. A partir de la experiencia en los cuatro países, el produjo un relato de viaje, narrando críticamente la experiencia en cada ciudad, llamado Informe y resumen general de actividades en Sudamérica. Posteriormente, Valcárcel Medina participaría enviando obras a la exposición Década de 70, organizada por el CAYC.
Isidoro Valcárcel Medina (n. 1937) es pionero en España de las prácticas conceptuales; su obra se ha caracterizado por romper con esquemas convencionales de arte. La producción artística es centrada en la creación de “situaciones”, intervenciones, acciones o proyectos, los cuales trascienden el cometido de un objeto artístico, trayendo a la luz su actitud comprometida y alejada de los aspectos comerciales del arte.
En el CAYC, Valcárcel Medina realizó una individual donde expuso varios registros de sus “acciones”. Uno de ellos se realizó en Paraguay, donde estuvo antes de llegar a Buenos Aires: 136 Manzanas de Asunción. Implica un recorrido por las calles de la capital paraguaya, donde se acercaba a los transeúntes pidiéndoles acompañarlo una cuadra. Así, recopiló información sobre el barrio, el acompañante y la ciudad o el país. Reunió amplia documentación sociológica sobre el lugar visitado. Otra acción tenía contenido político explícito, obra pidiéndole a la gente firmar el nombre del presidente chileno Salvador Allende (1908-73) en una hoja grande de papel. La idea original era que las hojas siguieran circulando y recibiendo nuevas firmas. Para evitar problemas de censura en el contexto de la dictadura militar argentina (1976-83) se aconsejó al artista que destruyera la copia llevada a Buenos Aires.